Max Verstappen le sacó a Fernando Alonso casi 40 segundos en el Gran Premio de Bahrein. Sergio Pérez, 27 segundos. Una diferencia abismal que demuestra la superioridad de Red Bull en este comienzo de temporada. Y se guardaron cosas.

Según ha informado 'Auto Motor und Sport', desde el muro pidieron a sus dos pilotos que redujeran la potencia del motor después de su segunda parada en boxes.

La radio de Verstappen se pudo escuchar durante la retransmisión. Le pidieron que no bajara los tiempos de 1'37'0, algo que le 'mosqueó'. "No me importa bajar el ritmo, pero si ambos bajamos el ritmo...", dijo refiriéndose a Pérez.

Y en el muro le repitieron la consigna, dejando claro que no estaba luchando contra su compañero de equipo: "No estáis compitiendo en este momento, Max. Me voy a aburrir de esto, así que hazlo, por favor".

Ahora la gran pregunta es por qué Red Bull pidió esto a sus pilotos: ¿existe un temor a la debilidad de ese motor o es simplemente guardarse ante la superioridad manifiesta que han demostrado a sus rivales?

Helmut Marko, asesor de la escudería, reconoció tras la carrera que sufrieron complicaciones: "Tuvimos algunos problemas, pero pudimos mantener el ritmo y regular la temperatura de los neumáticos".

"Las temperaturas eran muy muy altas, si hubiéramos tenido que conducir a toda velocidad podríamos haber tenido problemas...", dijo el asesor.

Pero a pesar de esos problemas, si es cierto que los sufrieron, los dos Red Bull fueron infinitamente superiores a los Aston Martin, los Ferrari y los Mercedes. Nadie puede toser a la escudería austriaca... al menos en este comienzo de año.