Alpine ha tenido muy poco ritmo durante todo el fin de semana, algo que, junto con una mala comunicación entre piloto e ingeniero, supuso que Alonso no fuera capaz de pasar de la Q1.

Además, en el último momento, los hombres de Alpine decidieron cambiar la unidad de potencia del monoplaza del asturiano, lo cual implicaba que Fernando tuviera que salir último en el GP de España. De salir desde la decimoséptima posición a la vigésima hay muy poca diferencia, por lo que no se ha visto demasiado perjudicado por esta decisión.

Con nada que perder y mucho que ganar, Alonso ha protagonizado una gran salida a la que le ha seguido una remontada hasta los puntos. Sin embargo, una vez más, cuando el asturiano peleaba con Norrispor la octava posición, una muy mala parada en boxes le ha hecho volver a perder posiciones y tener que remontar de nuevo.

Un escenario que hemos visto repetido, y es que en el anterior carrera, en el GP de Miami, ocurrió lo mismo, algo inaceptable, especialmente si realmente quieren empezar a luchar con los equipos grandes.

A pesar de ello, Alonso le ha quitado hierro en la zona mixta. "La verdad es que salir último y acabar en los puntos... no se puede pedir más. Ha sido un buen día en cuanto a carrea, equipo, estrategia... El último pit stop un poco lento, pero no hubiese cambiado mucho las cosas. Sabíamos que este fin de semana iba a ser difícil puntuar y lo hemos conseguido, así que bien. Ha sido un fin de semana un poco raro, no hemos sacado todo el potencial, un sexto o séptimo podría haber sido posible, a ver si seguimos con la buena racha", ha asegurado Alonso para 'Dazn'.

La Fórmula 1 no tiene tiempo para descansar y pone ya rumbo a Mónaco. Veremos si Alpine logra tener un poco de suerte de su lado y empiezan a conseguir los resultados que quieren.