Lewis Hamilton y Mercedes. Juntos desde siempre. Desde que estaba en McLaren, con un motor alemán en el chasis del coche de Woking. Y, claro está, desde que firmó por el fabricante en 2013 para, de la mano, sumar seis Mundiales de F1. Todo, con no pocas renovaciones que se alargaron y no precisamente poco pero que ni él ni su jefe dudaron de que llegarían a buen puerto.

Así lo ha reconocido Toto Wolff. Así lo ha reconocido su jefe. Un jefe que, además, mantiene una relación más que estrecha con el piloto. Una de gran confianza. De sinceridad. De tanta que incluso Lewis le llegó a reconocer que, mientras se encontraban negociando su renovación, cenó con Ferrari.

Con el presidente de Ferrari. Con el mandamás. Con el gran líder de la 'Scuderia'. Sí, le reconoció que cenó nada más y nada menos que con John Elkann.

"Debes saber que no voy a ninguna parte"

"Me vi con él en una cena, pero debes saber que no voy a ninguna parte", afirmó Wolff poniendo en su boca palabras del heptacampeón del mundo.

Y prosiguió: "Me dijo, 'Toto', no estoy negociando. No sé de dónde vienen esas historias", cuenta el austríaco en palabras que recogen en 'La Gazzetta dello Sport'.

Cero dudas tenía Wolff de todo: "Estaba claro que Hamilton se quedaría aquí con nosotros. Siempre hemos sido muy transparentes el uno con el otro".

Hamilton, ¿en Mercedes hasta el final?

Lo cierto es que han sido dos las renovaciones que se han postergado más de la cuenta. Sobre todo la de 2020, cuando incluso con la pretemporada ya a punto de comenzar Hamilton no había firmado con los alemanes.

Y en esta ocasión, sin haber llegado a tal extremo, también se especuló y no precisamente poco con la opción de ver a Lewis vestido de rojo.

Al final, nada, y el inglés seguirá vinculado a Mercedes hasta, quién sabe, el final de su carrera en la F1.