Fue el piloto del día. Fue elegido como el mejor de todos cuantos corrieron en el siempre exigente circuito de Jeddah. En el siempre exigente GP de Arabia Saudí. Terminó séptimo, con un buen saco de puntos en el que fue su debut con Ferrari. En un sábado que no olvidará. En un sábado con el que Oliver Bearman a buen seguro soñó cuando era niño.

Y que a saber si en dichos sueños todo salía tan bien como salió para él en el fin de semana en tierras saudíes. Porque todo lo que tenía que hacer lo hizo. Lo hizo bien. Y no era fácil, ni mucho menos. Porque esta pista no es de las que permiten fallos. No es de las que toleran los errores. Esta pista, que solo probó con el Ferrari durante los Libres 3, es de las más complicadas de todo el Mundial.

Además, la presión. La presión del debut. De ser el más joven en vestir de rojo. De vestir el color más mítico de toda la Fórmula 1. Apenas 18 años tiene, apenas sumaba Alonso sus primeros triunfos en la competición cuando Bearman estaba 'en proceso'. Pero él, tan tranquilo.

Escuchando a buen seguro los consejos de su jefe, Fred Vasseur. También los de Fernando Alonso, que también tuvo unas buenas palabras para él tras la clasificación. Y, claro está, recibiendo desde el muro la ayuda de Carlos Sainz para que todo fuera perfecto.

Así fue. La salida, sin líos ni problemas aún saliendo en una zona más que complicada. Luego, haciendo lo que debía hacer. Llevó el coche al paso por la bandera a cuadros, y tras ella recibió un reconocimiento que a buen seguro le ha hecho especial ilusión.

Uno de Lewis Hamilton. Del heptacampeón del mundo. De un piloto inglés, como él. Del futuro miembro de Ferrari. Cuando la prueba acabó, Hamilton fue a la altura del Ferrari de Bearman para aplaudir su actuación en Jeddah.

No es para menos, porque con poco hizo lo máximo que podía hacer. Porque fue aprendiendo con el paso de las vueltas. Porque firmó un fin de semana que no va a olvidar por más tiempo que pase. Sin errores, sin prisas. Bearman, piloto del día para los aficionados... y para no pocos de los pilotos con los que compitió en Arabia Saudí.