Caso Koldo
Tragsa e Ineco pagaron casi 44.000 euros a Jéssica, exnovia de Ábalos, aunque no iba a trabajar
El contexto El juez que investiga el 'caso Koldo' en la Audiencia Nacional ha incorporado a la causa los informes referidos a ambas empresas públicas.

Resumen IA supervisado
Las empresas públicas Tragsa e Ineco pagaron casi 44.000 euros a Jéssica Rodríguez, exnovia del ministro José Luis Ábalos. Esta información se detalla en una providencia del juez Ismael Moreno, que investiga el 'caso Koldo' en la Audiencia Nacional. Según los informes solicitados a ambas empresas, Tragsa pagó a Rodríguez 9.500,54 euros, mientras que Ineco le abonó 34.477,86 euros. En total, la suma asciende a 43.978,40 euros, aunque no se prestaron servicios laborales por parte de Rodríguez.
* Resumen supervisado por periodistas.
Las empresas públicas Tragsa e Ineco pagaron casi 44.000 euros a Jéssica Rodríguez, exnovia del ministro José Luis Ábalos, aunque ella misma reconoció que nunca llegó a ir a trabajar. Así consta en una providencia, a la que ha tenido acceso laSexta, por la que el juez Ismael Moreno, que lleva el llamado 'caso Koldo' en la Audiencia Nacional, incorpora a la causa los informes requeridos a ambas empresas.
En concreto, entre ambas empresas le habrían pagado un total de 43.978, 40 euros: Tragsa admite haberle pagado 9.500,54 euros, mientras que Ineco le pagó 34.477,86.
La propia Jéssica admitió en sede judicial que, aunque estuvo contratada en ambas empresas públicas, nunca fue a trabajar. Durante su declaración como testigo ante el Tribunal Supremo, afirmó que le dijeron que la llamarían si la necesitaban, pero que eso no sucedió. Además, en la investigación obran audiosque apuntan que no trabajaba en esas empresas dependientes del Ministerio de Transportes. En ellos, confirmaba que no acudía a los centros de trabajo y reconocía no tener "ni puta idea" de lo que se hacía allí.

Por su parte, la que fuera su jefa en Tragsatec, Virginia Barbancho, declaró como testigo ante la Audiencia Nacional que recibió la orden de hacer la "vista gorda" con la contratación de la novia del exministro socialista, a quien le presentaron como su "sobrina".
A su vez, la expresidenta de Adif Isabel Pardo de Vera está imputada por el presunto 'enchufe' de Jéssica en dos empresas públicas, así como por su presunto papel en la trama Koldo-Ábalos-Cerdán de adjudicaciones amañadas. El pasado mes de julio declaró como investigada ante el juez Ismael Moreno y se desvinculó de su contratación, asegurando que ella se limitó a pasar su currículum. "Si hubiera sabido que no trabajaba, no lo hubiera consentido", sostuvo.