La quinta temporada de 'The Crown' se estrena en Netflix el próximo 9 de noviembre y, aunque llevamos mucho tiempo hablando de lo que veremos en los episodios que se adentran en los años 90, el tráiler confirma que veremos la época más complicada para la corona británica. Con su popularidad en cotas bajas, la familia real se enfrenta a su mayor reto hasta el momento: demostrar que siguen siendo relevantes en la Gran Bretaña de los 90.

Además, en el ámbito personal, la situación insostenible del matrimonio trasciende y se hace de dominio público en una guerra mediática entre Diana y Carlos que empieza a socavar a la institución monárquica. Los nuevos capítulos reflejan una época muchos más cercana en el tiempo, gran parte del público recordará los hechos históricos que se dramatizan en la ficción y sobre todo es delicado para los propios protagonistas. Así lo ha reconocido el propio creador de la serie, Peter Morgan, en unas declaraciones recientes.

El revuelo alrededor de la serie es tal que, por primera vez, Netflix ha incluido una advertencia de que lo que se ve en la serie es una "dramatización basada en hechos históricos". Lo ha hecho en unas líneas en la descripción del tráiler publicado en Youtube y es la primera vez que se incluye una aclaración como esa: "Esta serie, basada en hechos históricos, dramatiza la historia de Isabel II del Reino Unido y los acontecimientos políticos y personales que dieron forma a su reinado". No sabemos aún si los episodios también incluirán algún aviso en esa línea.

Momentos clave de la temporada

No es la primera vez que desde el entorno de Buckingham muestran su disconformidad con una serie que, aunque ficción, es totalmente fiel a los hechos históricos. Uno de los momentos que van a aparecer en la serie, tal y como se ve en el tráiler, es la entrevista que Lady Di dio a la BBC en la que dijo que "en el matrimonio eran tres". Y veremos el momento en el que los diarios británicos publicaron conversaciones privadas del príncipe Carlos con su amante, Camilla Parker Bowles. Esta guerra mediática tuvo una repercusión negativa en la imagen tanto del príncipe Carlos como de la propia institución.

Sin embargo, mientras la imagen de la monarquía empeoraba, Diana de Gales contaba cada ve más con la empatía y el cariño del pueblo. Sus apariciones públicas generaban una gran espectación y uno de los momentos clave fue la asistencia de Lady Di a una fiesta de Vanity Fair el mismo día en que se emitía por televisión un programa en el que el príncipe Carlos terminaría reconociendo su adulterio. En un principio, ella no iba asistir, pero cambió de opinión días antes. Lady Di se presentó con un atrevido vestido corto negro y con un escote que dejaba los hombros al descubierto rompiendo totalmente con las reglas del protocolo de la casa real británica. El negro únicamente se utiliza para el luto oficial, y el escote y el largo también excedían las normas de la etiqueta. Desde ese día, aquel look se conocería como el "vestido de la venganza" y la princesa Diana adoptó, desde entonces, un estilo más sexy, sofisticado y glamuroso. Era el año 1994 y aunque la pareja llevaba años separada, el divorcio no se produciría hasta 1996.

Con la quinta temporada no terminarán los momentos incómodos. Lo más doloroso será la trágica muerte de Lady Di en 1997 que se contará en los episodios de la próxima entrega que ya está siendo rodada. El propio equipo de rodaje ha declarado los nervios por la grabación de una escena tan delicada, si bien el accidente mortal no se va a rodar, únicamente los momentos previos y posteriores. De eso se deduce que la quinta entrega abarcará justo hasta el divorcio de Carlos y Diana.