Noveno podio de la temporada para Carlos Sainz el conseguido en el Gran Premio de Brasil. Este, obtenido gracias a un trabajado adelantamiento a Sergio Pérez que le valió la tercera posición en Interlagos.
La carrera comenzó muy bien para el piloto de Ferrari, optando al podio remontando desde la séptima posición. Sin embargo, un tear-off (una de las viseras que se pueden quitar del casco) se le enganchó en la rueda trasera y se vio obligado a parar en boxes, lo cual descartaba sus opciones de subir al cajón.
Pero la suerte le sonrió. Lando Norris rompió su motor y provocó un Safety Car que le permitió poner un neumático blando mucho más fresco que los usados que llevaba Pérez. No obstante, el adelantamiento lo tuvo que trabajar bastante.
El piloto de Red Bull defendió duramente su posición, pero era cuestión de tiempo que Sainz pasase. Y lo hizo en la curva 4, con cierta facilidad tras varios intentos y rápidamente generó el espacio suficiente para asegurarse la tercera plaza... hasta que llegó la presión de Charles Leclerc.
El monegasco estaba lejos, a cuatro segundos del español, pero pidió en repetidas ocasiones a Ferrari que Carlos se dejase pasar para conseguir más puntos de cara al subcampeonato que el '16' tiene en juego con 'Checo'. El ingeniero de Leclerc fue claro y le negó que fueran hacer el movimiento, argumentando que era demasiado arriesgado porque Fernando Alonso, quinto, estaba muy cerca suya.
Finalmente, Carlos Sainz acabó tercero, detrás de los dos Mercedes, y sumó así su noveno podio del año.