Carlos Sainz se ha ganado el respeto de la Fórmula 1. Merecía tenerlo ya, pero es ahora cuando por fin tiene el respeto y la atención de la F1. Ha sido gracias a su triunfo en Australia, uno que llegó dos semanas después de su operación de apendicitis y que además sirve para demostrar de nuevo el tremendo compromiso que tiene con Ferrari... sabiendo lo que sabemos todos.

Sabiendo que en cuanto acabe 2024 tiene que marcharse. Que no tiene sitio el año que viene en un equipo con el que ha logrado ganar. Al que ha llevado a ser el único no Red Bull en celebrar un triunfo desde que terminase 2022. Sí, con todo, Sainz dio la cara en Melbourne.

Sainz sigue dando la cara por Ferrari. Sigue sacando, como los grandes campeones, más tanto de sí mismo como del coche que pilota. Tanto es así que de no ser porque en Jeddah no pudo competir ahora mismo sería líder de un Mundial en el que está Max Verstappen.

"Le han dicho que no le necesitan"

Todo eso ha hecho que se gane a la F1. Tanto a la actual como a la clásica, con no pocos expilotos rendidos por completo al madrileño. Es el caso, por ejemplo, de Damon Hill, campeón del mundo en 1996.

El británico ha puesto el triunfo en Australia por encima del de Singapur: "Con todo lo que le ha pasado... Le han dicho que ya no le necesitan cuando el año termine. Eso puede desmotivar a alguien".

"Pero en su personalidad no está eso. Está usando ese Ferrari para hacer lo que sabe. Cuando alguien está hundido o bien se vuelve a levantar o bien se sigue arrastrando. Él ha demostrado que sabe pelear, y que es muy bueno cuando pelea. Lo ha expresado de manera maravillosa en Melbourne", dijo en el podcast 'F1 Nation'.

Es que Hill ha puesto a Sainz en el lugar donde debe estar: "Lo he sentido desde Silverstone, cuando Sainz preguntaba por lo que debía hacer o se molestaba cuando le daban órdenes de equipo. Sainz es inteligente. En Australia ha demostrado que no solo piensa sino que también es rápido. En carrera, Leclerc se vio superado".

"Y no estábamos seguros ni de que pudiera pilotar. Miras su cara y ha perdido mucho peso. No pudo aumentar sus reservas de energía, no pudo entrenar. Es increíble lo que ha hecho", concluye Hill.