El ministro Escrivá propone bonificar con hasta 12.000 euros a quienes retrasen un año su jubilación, pero también significaría que a quien se jubile antes le pueden quitar hasta un 21%. ¿Es esto en la práctica bajar las pensiones? Es la pregunta que Mamen Mendizábal ha lanzado a Miren Etxezarreta, catedrática de Economía y experta en pensiones, que ha afirmado en Más Vale Tarde "que la mayoría de las medidas que se están tomando desde hace bastante tiempo en el ámbito de las pensiones están dirigidas a disminuir el gasto en pensiones y, por tanto, a disminuir las pensiones".

Etxezarreta ha centrado su análisis en ese incentivo de los 12.000 euros planteado por el Ministro de Inclusión y Seguridad Social: "Esta medida me parece extremadamente peligrosa. Escrivá es muy inteligente, y se ha dado cuenta de que antes, cuando aumentaron la edad de la jubilación, hubo fuertes reivindicaciones por parte de los pensionistas y la ciudadanía. Ahora ha decidido una manera más hábil de hacer lo mismo". Esto es, según la experta, que se haga de forma voluntaria. Una idea que, para ella, está dirigida "a dividir a los pensionistas y sus reivindicaciones".

"Con este incentivo, el gran peligro es que distintos grupos de pensionistas tomen distintas posiciones. Frente a una visión bastante unitaria que había hasta el momento, esto puede dividir porque: ¿quién va a aceptar esos 12.000? ¿Quién puede? No nos olvidemos que las pensiones no son las máximas, son mucho más bajas", ha valorado Etxezarreta, que ha insistido en que se trata de "un regalo muy perverso porque es muy atractivo", y ha recordado que "hay muchísimos pensionistas que al final de su vida no han llegado a tener 12.000 euros".

Para la experta, si ahora "les ofrecen el 50% aproximadamente de lo que cobran en un año, si se les ofrece este ahorro de golpe con el que no han contado, resulta verdaderamente tractivo para mucha gente". Así las cosas, Etxezarreta cree que los pensionistas tienen que darse cuenta de las intenciones que, para ella, tiene el Ministerio: "Porque somos mayores, pero no tontos. Es un regalo envenenado". Pero la catedrática ha querido ahondar aún más en los efectos de este incentivo desde una perspectiva distinta.

"¿Estamos seguros de que las empresas van a aceptar que los trabajadores continúen trabajando más allá de la edad legal en la situación que planteamos ahora?", ha señalado Etxezarreta, que ha apuntado que "grandes empresas con muchos beneficios están expulsando a trabajadores, despidiendo a miles". Así, ha concluido con esta reflexión: "¿Esta el mercado de trabajo de el país como para que se mantengan a trabajadores por encima de los 66 años?".