La sal está detrás del 60% de los infartos que sufrimos y del 80% de los problemas renales.Los profesionales sanitarios alertan de los problemas de salud derivados de una ingesta excesiva de sal, que en España asciende a 3,5 kilos al año por adulto.

Los traumatólogos también han dado la voz de alarma y recuerdan qué puede ocurrir ante el consumo desmesurado de este mineral. "Si consumimos mucha sal, sabemos que nuestros huesos van a estar más débiles en el futuro", asegura en Equipo de Investigación el especialista José Miguel Guijarro.

"Cuando tomamos mucha sal, el calcio que tenemos en la sangre en lugar de pasar al hueso se elimina por la orina", explica el traumatólogo, una situación que provoca osteoporosis. "Una disminución del calcio en el hueso, provocando fragilidad", así como un mayor riesgo de rotura en el mismo.

La artrosis, por otra parte, viene derivada en gran cantidad de casos por la ingesta de sal. "Cuanta más sal tomamos, mejor la toleramos y no nos parecen -los alimentos- tan salados, de manera que vamos añadiendo más a las comidas, casi inconscientemente", advierte el neurólogo David Pérez, como puede observarse en el vídeo situado sobre estas líneas.