Genocidio en Palestina
¿Quiénes son Smotrich y Gvir, los halcones extremistas de Netanyahu a los que España veta?
El contexto El Gobierno de España ha dado un paso más en sus medidas contra el Estado de Israel después de que los de Benjamin Netanyahu hayan declarada como personas 'no gratas' a las ministras Díaz y Rego.

Resumen IA supervisado
El Gobierno de España ha respondido al veto israelí impuesto a las ministras Yolanda Díaz y Sira Rego con una serie de medidas, incluyendo la prohibición de entrada a los ministros israelíes Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir. Smotrich, ministro de Hacienda, es conocido por promover asentamientos ilegales en Cisjordania y por sus declaraciones extremistas, como pedir dejar sin agua a los palestinos. Comparte ideología con Ben-Gvir, quien fue condenado por incitación al racismo y apoya la pena de muerte para presos palestinos. Ambos ministros son considerados los más radicales del Gobierno de Netanyahu.
* Resumen supervisado por periodistas.
Tras anunciar este lunes una batería de nueve medidas contra Israel, el Gobierno de España ha dado un paso más en respuesta al veto israelí de entrada en su territorio a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, así como a la titular de Infancia, Sira Rego. Por eso, ha hecho lo mismo con los ministros ultras israelíes Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir. Pero, ¿quiénes son?
Probablemente, se trata de los dos ministros más radicales del Gobierno, a su vez, más radical de la historia de Israel. En definitiva, los dos más violentos del Ejecutivo que está perpetrando un genocidio en el enclave bajo las órdenes de su primer ministro, Benjamin Netanyahu. Tanto que Smotrich, como ministro de Hacienda, se ha convertido en la estrella ultra del dirigente israelí.
¿Por qué? Pues, por ejemplo, porque es el impulsor de los asentamientos ilegales de colonos en Cisjordania. Un proyecto que nace con el objetivo de enterrar "la idea de un Estado palestino, simplemente porque no quedará nada que reconocer ni nadie a quien reconocer". Además, siempre se ha vanagloriado de que el Ejército israelí haya arrasado la Franja de Gaza, llegando incluso, a pedir a su Ejecutivo que deje a los palestinos sin agua.
Si bien está claro que su objetivo es el de borrar cualquier huella palestina, su ideario también es homófobo. Tanto que llegó a calificar el orgullo gay como un "desfile de bestias". Una ideología extremista que también comparte el otro ministro vetado por el Gobierno español, Ben-Gvir. Precisamente, fue algo que no le permitió hacer el servicio militar, pero sí convertirse en el otro halcón de Netanyahu.
Ya a los 30 años fue condenado por incitación al racismo y por apoyar organizaciones terroristas. Algo que no sorprende al tener en cuenta que ha dicho auténticas barbaridades como que el Ejército israelí debía disparar contra mujeres y niños palestinos. Una crueldad que va a más con visitas a presos palestinos en la cárcel con el único fin de burlarse de ellos, para los que también pide la pena de muerte. A sus ojos, "es la solución correcta al problema del encarcelamiento".