El Balonmano Femenino ha puesto fin a una norma sexista de este deporte, que obligaba a las jugadoras de balonmano playa a jugar en bikini.

La Federación Internacional de Balonmano permitirá a partir de ahora jugar con pantalones cortos, tal y como ocurre en el balonmano masculino.

Un cambio que ha sido provocado por la protesta de la selección de Noruega, que jugó un partido con pantalones y fue sancionado con una multa incomprensible de 1.500 euros.

Este acto de reivindicación de las jugadoras noruegas ha puesto fin a una norma machista que también ha sido eliminada de otros deportes como el voley playa.