Otro escándalo más se ha producido en el Dakar 2022 cuando solo acaba de empezar. Después de que muchos pilotos se quejaran en la primera etapa por el sufrimiento de la navegación por las dunas árabes, salvo Nasser Al-Attiyah que logró una trazada limpia y única, ahora desde la FIA han perdonado al catarí la descalificación.

El líder del Dakar ha sido sancionado por no conectar el colector de datos, la caja negra que registra las prestaciones de su coche. Esta grave irregularidad está claramente contemplada en el reglamento como descalificación.

Al no estar conectado el colector de datos, el asistente delegado técnico de la FIA no pudo asegurarse de que los valores de la presión del turbo fueran correctos, por lo que desde la federación se ha puesto un ultimátum a Al-Attiyah: "Supondrá una suspensión hasta el final del Dakar 2022 si se incumple una norma de naturaleza similar a la incumplida por el competidor del coche 201 durante este período".

Además, se ha multado al mecánico que no puso el colector de datos al Toyota Hilux con 5.000 euros. El pago debe realizarse online en las próximas 48 horas, en caso de retrasarse también será descalificado.

"Sencillamente fue un error de nuestros mecánicos. Simplemente olvidaron conectar el colector de datos a la batería. Desconectamos el colector de datos cada noche de la batería por razones de seguridad. Revisaré personalmente que esté conectado en los próximos días", argumentan desde su equipo.

Sorprende mucho esta decisión después de que ya desde la primera etapa, muchos pilotos como Sainz, creyeran que el catarí tenía "información extra", y esto parece ser otra ayuda para él.

Así argumenta la federación su decisión: "Una descalificación de toda la carrera no parece proporcional, sobre todo porque el competidor ha confirmado que solucionará el problema inmediatamente para que su coche cumpla con la normativa los próximos 10 días".

"Yo he venido aquí a servir al fútbol"

"Por echar una mano" y otras surrealistas afirmaciones de Pedro Rocha en su declaración por el 'caso Brody'

El candidato único a presidente de la RFEF protagonizó una declaración surrealista de 40 minutos que acabó provocando, junto a su falta de explicaciones a las preguntas del fiscal, su cambio de testigo a imputado.