Max Verstappen sigue de dulce. Tras el borrón de su abandono en el Gran Premio de Australia, que puso en bandeja la victoria de Carlos Sainz, el piloto neerlandés afrontaba el Gran Premio de Japón con la obligación de dar un golpe sobre la mesa para despejar las dudas, y lo ha hecho logrando la pole position.
Sin embargo, la clasificación no ha estado exenta de sufrimiento para el tricampeón del mundo. Ha sido el primer sábado de la temporada en el que Checo Pérez le ha puesto contra las cuerdas, hasta el punto de que la diferencia entre los dos pilotos de Red Bull en la Q3 ha sido de tan solo seis centésimas de segundo.
Tras la clasificación, Verstappen ha hablado sobre lo incómodo que se ha sentido hoy en Suzuka. "No me quedaba más en la vuela de la pole. Me encantaría hacer vueltas perfectas, pero no siempre es posible, aunque ha sido suficientemente buena", ha dicho el neerlandés en declaraciones a 'DAZN'.
"No estamos tan cómodos, los Ferrari han sido fuertes. Espero que los cambios que hemos hecho antes de la 'qualy' nos ayuden", ha añadido.
Pero Checo Pérez y los Ferrari, con la cuarta posición de Carlos Sainz, no son las únicas amenazas para Verstappen. Lando Norris y Fernando Alonso, que salen tercero y quinto, respectivamente, intentarán aprovechar cualquier oportunidad que concedan los Red Bull. Y por si fuera poco, el pronóstico de lluvia puede ser la gota que colme el vaso y vuelva a complicarle la vida a Max.