Fernando Alonso cruzó la línea de meta del Gran Premio de Arabia Saudí, fue sancionado por la FIA y perdió el podio... y lo acabó recuperando de madrugada. El número 100 de su carrera y un ridículo espantoso de la FIA, que tomó la decisión cuando ya se había terminado la prueba.

El trofeo de Alonso terminó en manos de George Russell, que había sido cuarto con Mercedes. Un gran amigo del asturiano, con el que se han enviado mensajes públicos por redes sociales en tono jocoso.

Alonso le pidió a Russell que le devolviera su trofeo. Y así ha sido. Mercedes, en un vídeo, ha demostrado cómo devolvieron el premio a la fábrica de Aston Martin, muy cerquita de la suya.

Un trabajador del equipo subió el premio a su coche, con cinturón incluido, y acabó colocándolo en la vitrina de la escudería verde. Se nota el buen rollo entre dos equipos 'hermanados' por esos motores que comparten.

De momento Aston Martin ha sido más rápido en la pista que Mercedes, pero eso podría cambiar en cualquier momento. Las flechas de plata ya demostraron en Yeda que no están tan lejos e incluso fueron más rápido que Ferrari.