Tanto la FIA como la propia Fórmula 1 se encuentran investigando cómo evitar que lo sucedido durante el Gran Premio de Qatar vuelva a suceder. Sin embargo, a pesar de los vómitos, mareos e incluso desmayos a los que los pilotos tuvieron que hacer frente, hay quien defiende que eso es parte de la competición.

Y ese alguien es Lewis Hamilton que, a pesar de que no pudo completar ni una sola vuelta en la carrera larga del domingo, asegura que la dureza es parte de la competición, ya que la Fórmula 1 es un "deporte extremo".

"Obviamente, yo no corrí la carrera, ósea que no pude sufrir de primera mano las consecuencias. Pero Malasia era mucho más caluroso y sé lo que se siente al perder más de cuatro kilos en la carrera y que te cueste mantenerte de pie después", asegura Lewis a 'Sky Sports'.

"Mi sensación es que es un deporte extremo (la F1). No hay corredores de maratón que, después de desmayarse al final de la prueba, pidan que se haga más corta. Este es un deporte extremo y nosotros estamos muy bien pagados por hacerlo y, desde mi perspectiva, si no me encuentro bien al final de una carrera me preparo mejor para la siguiente", añade.

Y, realmente, razón no le falta al heptacampeón. Sin embargo, a pesar de que los pilotos están muy bien pagados y están cualificados para pilotar en situaciones extremas, la FIA tiene claro que lo primero es la seguridad y, por ello, a pesar de las palabras de Lewis, van a continuar estudiando como modificarlo.