Red Bull está firmando el dominio más aplastante de la historia de la Fórmula 1 y, no contentos con eso, todo parece indicar que repetirán la historia la próxima temporada. Es por ello por lo que mucha gente se pregunta si la propia competición podría hacer algo para igualar la competición.

Sin embargo, esto es algo completamente inviable. La Fórmula 1 es un deporte que se basa fundamentalmente en la meritocracia y, al igual que sucedió con el dominio de Mercedes en la era híbrida, Red Bull ha dado con la tecla y por ello merecen lo que están consiguiendo.

Así al menos lo ha dejado saber Mohammed ben Sulayem, presidente de la FIA, a través de unas declaraciones recogidas por 'Motorsport': "Ha sucedido muchas veces, basta con mirar a Lewis Hamilton y Michael Schumacher".

"¿Cómo parar? Es un poco duro, y no está bien ir y castigar el éxito. Estoy abierto a sugerencias si se cree que hay una manera de ser justo y democrático, y no solo castigar a Max y a su conjunto, o a cualquier otro, somos todo oídos. Estoy atascado, no hay forma de que la FIA frene el éxito, y ya ha ocurrido dos veces en mi vida", añade el mandamás de la F1.

A corto plazo, la única solución que parece viable para que la Fórmula 1 vuelva a recuperar su esencia es la correcta evolución del resto de equipos. Solo de esta manera, siguiendo los pasos de Red Bull, el campeonato se podría decidir entre más de dos escuderías.