A Red Bull no hay nadie que le tosa. Incluso sólo con Max Verstappen en el equipo podrían competir por el mundial de constructores. Tienen al mejor piloto de la parrilla y de largo el mejor coche. Por eso se toman a risa los comentarios que llegan procedentes de Mercedes.

Toto Wolff, jefe de las flechas de plata, dijo que los récords de Red Bull "sólo servían para la Wikipedia". Y ahora Helmut Marko ha respondido con un claro desprecio, asegurando que ni mucho menos piensan en ellos.

Tras el Gran Premio de Italia, donde Max Verstappen logró su décima victoria seguida, el asesor de Red Bull lanzó un dardo a Mercedes: "Nos fijamos en nuestro equipo para obtener el mejor rendimiento de nuestro propia escudería, y no nos preocupamos por Mercedes mientras no sean un rival serio para nosotros".

"Así que sólo nos ocupamos de lo nuestro, lo hacemos lo mejor que podemos y no nos inventamos todo ese tipo de historias como hacen ellos", insiste Marko.

Y elogia el papel de Max, que está haciendo historia en la Fórmula 1: "Para Verstappen esta racha de triunfos significa mucho. Para mí personalmente, conseguir la victoria número 100 como equipo fue incluso más especial que esto, pero es fantástico para Max".

"Él también estaba un poco nervioso por conseguirlo aquí. Creo que para él era muy importante batir ese récord, ahora lo tiene, así que creo que está un poco más relajado para las próximas carreras", comentó Marko a los medios de comunicación.

El Gran Circo regresa dentro de dos fines de semana con el Gran Premio de Singapur, en el circuito urbano de Marina Bay. Verstappen, claro, buscará la undécima consecutiva y la decimotercera de la temporada. Su tercer título con Red Bull está al caer.