Faltaban pocas vueltas para el final. Ni Daniel Ricciardo ni Lando Norris mejoraban el ritmo de Fernando Alonso. Y hubo un mensaje por radio de McLaren: "Sigamos empujando a Alonso a ver si comete un error".

Y el español ha respondido entre risas en 'DAZN' cuando le han preguntado por esta radio. "¿Cometer un error? Improbable, improbable", reía el bicampeón.

"Teníamos ese extra de velocidad. Esperaban algún fallo, pero intentaba hacer esas ultimas curvas bien", explica Alonso. Y así fue. Porque mantuvo esa séptima plaza.

"Sufrimos un poco más con los neumáticos de lo que esperábamos. Para mí mantener las ruedas de atrás fue mi mayor reto de hoy", explica el bicampeón, que este fin de semana se ha convertido en el piloto con la carrera más larga en Fórmula 1.

Alonso terminó séptimo, el mejor resultado posible, y tuvo tiempo para dejar este vacile a los dos McLaren, que no pudieron adelantarle.