El Real Madrid regresó a los entrenamientos con buenas noticias en la ciudad deportiva de Valdebebas, donde el capitán Sergio Ramos e Isco Alarcón trabajaron con intensidad junto a sus compañeros, recuperados de las molestias con las que regresaron de la selección española y listos para jugar en Turín.
Ramos e Isco podrán disputar, si Zinedine Zidane lo estima oportuno, el partido de ida los cuartos de final de la Liga de Campeones. Tras descansar por sus ligeras molestias ante la UD Las Palmas, los dos jugadores integraron el grupo que trabajó con mayor intensidad en la ciudad deportiva madridista.
Horas después de un triunfo plácido en el estadio Gran Canaria ante la UD Las Palmas (0-3), el Real Madrid regresó al trabajo en la única sesión en España con la que preparará el duelo europeo frente al Juventus.
Los que fueron titulares en el partido liguero tuvieron una sesión de recuperación, con la ausencia de Nacho Fernández, quien sufrió la primera lesión como profesional al sufrir un pinchazo muscular en los isquiotibiales derechos.
Jugadores que descansaron ante Las Palmas como Marcelo, Cristiano Ronaldo o Toni Kroos, o que no jugaron por sanción como Dani Carvajal, trabajaron con intensidad en un grupo que completaban Marcos Llorente, Mateo Kovacic, Dani Ceballos y Borja Mayoral.
Ejercicios de control de posesión y presión, disparos a puerta y partidos en reducidas dimensiones formaron el menú de trabajo del entrenamiento bajo la atenta mirada de Zinedine Zidane.
El técnico terminará de perfilar los detalles del enfrentamiento ante el Juventus en Turín, en la sesión vespertina del lunes, en la que decidirá un equipo titular en el que solo tiene una duda por completar el once al que tener que elegir una plaza entre Isco, Gareth Bale, Marco Asensio y Lucas Vázquez.