La contaminación acústica provoca daños en nuestra salud. Tres de cada cuatro habitantes de las grandes ciudades padecen ya algún grado de pérdida auditiva causada por exposición a sonidos de alta intensidad y 1 de cada 10 acabará siendo sorda dentro de 30 años, si no se modifican los factores de riesgo.
Así lo advierten los expertos de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), con motivo del Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido (26 de abril). Especial atención debemos poner en los jóvenes: diferentes trabajos han mostrado que la exposición a música de alta intensidad es una de las razones de la aparición de sordera a edades más tempranas.
Así, y según apuntan los expertos de esta sociedad científica, el uso de auriculares para escuchar música y la asistencia a conciertos y locales de ocio con música alta son los principales factores de riesgo para la audición de los jóvenes por exposición al ruido. De hecho y según apuntaba recientemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de jóvenes en el mundo corren el riesgo de sufrir pérdida auditiva irreversible debido a esas prácticas de audición poco seguras.
Las consecuencias de la contaminación acústica en la salud
Las consecuencias del ruido ya se ven reflejadas en nuestro país: la contaminación acústica causa al año 1.000 muertes prematuras y 4.000 hospitalizaciones, además de los más de 2 millones de personas que tienendificultades para conciliar el sueño, según datos de la Agencia Europa del Medio Ambiente (AEMA).
En España, 2 millones de personas tienen dificultades para conciliar el sueño por culpa del ruido
Tanto es así que según apunta la Sociedad Española de Acústica, "hasta un 30 % de las denuncias por ruido se deben a comportamientos indebidos de los ciudadanos" y es que "la contaminación acústica se ha convertido en uno de los principales problemas de nuestra sociedad". Según esta entidad, "es fundamental concienciar a la sociedad de que la contaminación acústica es un grave problema de salud pública, y de que su solución está en las manos de todos, de las administraciones y de los ciudadanos".
Entre los problemas de salud que el ruido produce, también la pérdida de audición se asocia, tal como han comprobado diferentes trabajos a lo largo de los últimos años, con un mayor riesgo de demencia: "Existe una relación clara entre perdida de audición y la demencia", afirmaba a laSexta.com el Dr. Luis Lassaletta, presidente de la comisión de Otología de la SEORL-CCC.
Es por ello que ruido y la contaminación acústica además de tener consecuencias en nuestra salud auditiva, también provoca otros efectos y problemas de salud como trastornos profundos del sueño, problemas en el sistema cardiocirculatorio, reducción del rendimiento, estrés e incluso un incremento de los ingresos hospitalarios urgentes por ansiedad y depresión.
De hecho, y según señala el 'I Estudio GAES sobre el ruido en España', el 34% de los españoles reconoce que la contaminación acústica les afecta el estado de ánimo. Además, y según este trabajo, se considera que "España es uno de los países más ruidosos del mundo y 9 de cada 10 españoles no se protege contra el ruido". Es verdad que hay veces en que esa protección no depende de nosotros.
Por ello y según aconseja el Dr. Juan Royo, jefe de Sección de Otorrinolaringología en el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza, "si no podemos evitar la exposición prolongada del ruido en la calle, debemos tomar precauciones para proteger nuestros oídos y prevenir problemas de salud, así como utilizar protectores auditivos para dormir, moderar el tono de voz, utilizar un volumen adecuado cuando escuchamos música o vemos la televisión, entre otras medidas".
Los ruidos más dañinos para la salud
Una de las claves más importantes a las que debemos atender para cuidar y proteger nuestra salud auditiva y audición es conocer ruidos más dañinos para reducir su intensidad y tiempo de exposición. "Para garantizar una buena salud se recomienda no superar los 65 dB", aseguran los otorrinos de la SEORL-CCC.
Mientras que "una exposición a un sonido superior a 85 dB supone un riesgo de pérdida auditiva si se repite en el tiempo". Así, "se admite que una exposición a 80 dB durante más de 8 horas al día, en el entorno laboral, requiere uso de protección auditiva para no ser lesiva. Por encima de 100 dB existe un riesgo de pérdida inmediata y el ruido llega al umbral del dolor cuando se sobrepasan los 125 dB y puede ser insoportable a los 140 dB", añaden los otorrinos.
De todos, el peor es del tráfico. Según aseguran estos profesionales, "el ruido del tráfico es la principal fuente de contaminación acústica, siendo el responsable de un 85% de las emisiones acústicas y puede alcanzar entre 80-85 dB. Tanto las ciudades de Madrid como de Barcelona se encuentran en diferentes rankings entre las 20 ciudades más ruidosas de Europa".
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Así y según los cálculos, "casi un tercio de los españoles están expuestos a niveles de ruido por tráfico superiores a los aceptables (65dB) lo que provoca pérdida de audición y otros problemas de salud", advierten. Es por ello importante, tomar conciencia de los ruidos y la contaminación acústica a la que estamos expuestos para protegernos poder protegernos adecuadamente.