Los De la Vega tratan en el primer capítulo de 'Deudas' de "convencer" a la familia Carranza de que les venda la academia. Como en el funeral no vieron a Pepa muy dispuesta a hablar, recurren a su intimidante guardaespaldas ruso Andrei para que les lleve a Raúl, que acude a la cita obligado por las amenazas y acompañado de su pareja Valeria.

Raúl Carranza es el más predispuesto al diálogo dentro de su familia, sobre todo, porque es una persona prudente que huye del conflicto aunque éste siempre acabe encontrándole. Esteban de la Vega ofrece al mayor de los hermanos una suculenta cifra para que vendan la academia y cuando el parece dispuesto a aceptar, Valeria le para los pies. En la reunión también está presente Chiquetete, el gato de Doña Consuelo, y cuando Esteban les deja solos para pensar en la oferta, Raúl acaba siendo atacado por el gato y la pelea acaba con Valeria atizando al animal con un palo de golf.

Desde luego, pegar al animal de la familia no es un buen comienzo para las negociaciones y acaban saliendo de allí rechazando la oferta de los De la Vega, que no van a aceptar tan fácilmente un no por respuesta. Raúl y Valeria deciden ocultar su encuentro a Pepa y al resto de la familia hasta que no les quede más remedio.

De nuevo en la academia, las consecuencias no se hacen esperar. Javi y su primo Iván se encuentran el bar destrozado, con una pintada invitándoles a irse y un cochinillo atravesado por un cuchillo. Mientras Lucía trata de invocar al espíritu de su padre, le lanzan por la ventana un corazón de animal y los queridos pájaros de Raúl, unos capuchinos arroceros, son las víctimas inocentes del conflicto.

Todos acuden asustados al encuentro de su madre. "Mamá, que nos han hecho un Corleone", le dice Lucía a Pepa aludiendo a las tácticas mafiosas. Después de escuchar a sus hijos, Pepa Carranza decide que no van a achantarse, ni a ceder al chantaje. "A esta familia no la jode nadie más".