Esto que vais a leer es un día cualquiera en el rodaje de 'La Casa del Dragón':

Os ponemos en situación... El astuto y ladino príncipe Daemon Targaryen dirige una reunión estratégica dentro de la penumbra iluminada por las antorchas del castillo de Rocadragón...

"Quiero patrullas a lo largo del perímetro de la isla. Recluta a los jinetes de dragones, son luchadores capaces... tenemos a Syrax, a Caraxes, a Tyraxes y..."

Matt Smith, el actor que da vida a Daemon hace una pausa. "¿Cuál es el nombre del cuarto dragón.? ¿Otra vez?"

"¡Ah, por el amor de Dios!" Smith grita. “¡No, joder! Quiero... ¡ah, a la mierda!".

La actriz Emma D'Arcy interpreta a la joven Rhaenyra Targaryen que es una de las principales protagonistas (si queréis conocer quién es quién en 'La Casa del Dragón',podéis hacerlo aquí) y simpatiza con el británico: "¡Todos los dragones tienen nombres extraños con muchas equis en ellos!"

"He llegado al punto en que pensé que estaba nombrando a los renos de Papá Noel", admite Smith.

Matt Smith es Daemon Targaryen.

El camino hasta Rocadragón

Esta pequeña toma del rodaje de 'La Casa del Dragón' es solo uno de los pequeños detalles que The Hollywood Reporter ha desvelado sobre cómo se ha gestado la que, esperan, sea la nueva gallina de los huevos de oro de HBO. El objetivo era obvio, pero el estado de ánimo se resume en: mucha ansiedad, demasiada. Por eso todo está medido y plegado a los designios de George R. R. Martin. Atrás quedan los días en los que HBO volaba sola sin consultar al autor de la saga de 'Canción de Hielo y Fuego'.

Los nombres de los personajes de 'La Casa del Dragón', y sus dragones han sido una fuente de discusión desde el principio. Martin busca la autenticidad y como en la vida real, las dinastías tienden a tener muchos nombres y sufijos repetitivos. Al principio del proceso de escritura, uno de los showrruners de la serie, Miguel Sapochnik, le señaló a su compañero Ryan Condal que iban a tener, por ejemplo, una Princesa Rhaenyra y una Princesa Rhaenys a menos que comenzaran a hacer ajustes a la mitología de Martin.

"Sabes que tenemos que cambiar algunos nombres", dijo Sapochnik a Condal.

Y Condal respondió: “No podemos”.

Martin es el tótem sobre el que se levanta 'La Casa del Dragón'. No van a repetir los errores de 'Juego de Tronos'. "Soy fan de estos libros desde hace 20 años", explica Condal. "Era fanático de Juego de Tronos: vi el episodio piloto la noche en que se emitió en HBO y todos los episodios posteriores. Me propongo, como aficionado a hacer lo que quiero ver, y estoy contento con lo que hemos logrado. Los Targaryen son como los jedi en 'Star Wars'. Este es el momento en el que son abundantes y poderosos y siempre quisiste ver eso. Vais a verlo.

Pero para llegar hasta aquí ha hecho falta una lucha épica casi tan arriesgada y dramática como la propia serie.

Emma D´Arcy es Rhaenyra Targaryen.

'Juego de Tronos' ha terminado... ¿y ahora qué?

Todo comenzó en el momento en que 'Juego de Tronos' empezaba a vislumbrar su final. En julio de 2016 HBO acababa de anunciar que su buque insignia concluiría con una octava y última temporada. La cadena aceptó así el plan creativo de David Benioff y Dan Weiss, los showrunners de la serie. La discusión sobre la estrategia de la plataforma, dirigida por el director de contenido de la empresa, Casey Bloys, giró de inmediato hacia dónde ir. Había que seguir explorando Poniente. Había que perpetuar el éxito de la serie basada en el universo de George R. R. Martin. La pregunta era sencilla de prever pero muy complicada de responder. ¿Qué proyecto basado en el trabajo de Martin realizar a continuación?

Por aquel entonces HBO quería construir una franquicia con 'Juego de Tronos' tal y como lo había hecho Disney con Marvel y 'Star Wars'. El problema era que la plataforma de WarnerMedia nunca había hecho ni un solo spin-off, precuela o secuela en sus cuatro décadas de historia. Y mucho menos todavía un universo creativo en expansión. Varios cargos de la compañía creían que el universo creado por R. R. Martin podría ser una oportunidad única. Es verdad que 'Juego de Tronos' se lanzó sin muchas pretensiones en 2011 pero su ascenso fue tan meteórico que terminó por convertirse en un fenómeno de audiencia y de la cultura pop. Sin mencionar que ha sido la serie dramática que más premios Emmy ha ganado de todos los tiempos.

Por eso lanzarse a expandir su universo entraña un riesgo tan enorme. Si la le nueva serie fracasase sería muy costoso y vergonzoso para HBO. Pero por otro lado... están las recompensas... y para las cabezas pensantes de la plataforma eran asombrosas: un flujo de contenido de títulos que podría abarcar décadas y generar miles de millones en ingresos. La motivación entonces fue la siguiente: ¿preferimos tener un millón de euros garantizado en el banco o lanzar una moneda al aire y poder ganar miles de millones? HBO decidió comenzar a lanzar monedas. Y todas tenían en la cara la imagen de un dragón y en la cruz el Trono de Hierro.

Paddy Considine es el rey Viserys.

Nervios y palos de ciego

Una fuente interna de la plataforma recuerda que "estaban comprensiblemente muy nerviosos por fallar y no estar a la altura de la serie original”, en las primeras discusiones sobre el desarrollo de los nuevos títulos. "No creo que hubiese mucha confianza internamente en que 'Juego de Tronos' pudiese convertirse en una franquicia porque la serie original era un hito único" continuaba reconociendo la misma fuente. La vicepresidenta ejecutiva del área de series de HBO, Francesca Orsi, recuerda: "Lo vimos como una oportunidad para seguir contando grandes historias, pero no necesariamente para tratar de reemplazar a 'Juego de Tronos' como el programa más épico de la historia".

Una vez decidido que había que continuar viajando a Poniente, George R. R. Martin, voló a Los Ángeles para reunirse con ejecutivos de HBO. Había que escuchar al maestro. De primeras lanzó dos ideas. La primera fue una serie basada en sus novelas de los personajes 'Dunk y Egg', que siguen a un caballero que vaga por Poniente con un joven escudero y de los que podéis saber más en este reportaje en el que os contamos todo lo que hay que saber sobre las novelas de Martin sobre el universo de 'Canción de Hielo y Fuego'.

La segunda idea la llamó 'La Danza de los Dragones' (no confundir con el quinto libro de 'Canción de Hielo y Fuego'), que relata la histórica guerra civil entre los antepasados ​​de Daenerys Targaryen, un asunto que destrozó a Poniente 180 años antes de los eventos de la serie. Martin reconoció que esta idea "tenía toda la intriga, la competencia por el Trono de Hierro, asesinatos, duelos, grandes batallas, 20 dragones...todo eso". Exacto. Todo eso por lo que se morirían los fans.

HBO rechazó 'Dunk y Egg' (por lo menos de primeras). A los ejecutivos les gustaba la segunda idea, pero no querían dejar que el destino y la fortuna de una franquicia potencial dependieran de una sola idea. “Quería darnos todas las posibilidades de éxito”, dice Bloys. “Porque lo que no quieres es reemplazar el show más grande de todos los tiempos y jugártelo todo a una sola carta, a un solo guion".

La plataforma investigó todas las obras de Martin y reunió alrededor de ¡15! posibles conceptos de precuela. Dado que los productores ejecutivos de 'Juego de Tronos', Benioff y Weiss, se negaron a participar en cualquier otra obra derivada de su serie, HBO se reunió con una gran variedad de guionistas. “Probamos de todo”, dice Casey Bloys. “Y no obtuvimos ideas demasiado rocambolescas”.

Bueno, aquí igual se olvida de que sí que hubo una idea de lo más bizarra: idearon un concepto de serie que sonaba como un equipo de superhéroes que serían los Siete Dioses de Poniente y tratados como si fueran personas reales. Vivían aventuras y llegaban a ser adorados como los dioses que luego acaban siendo. Otra fuente de la cadena reconoció tajantemente que “esa idea no llegó muy lejos”.

Finalmente, se seleccionaron cinco conceptos y se pusieron en desarrollo. Todos fueron precuelas ambientadas antes de los eventos de la serie madre. Este enfoque sin precedentes en la plataforma se conocería descaradamente dentro de HBO como...

La guerra de las cinco presentaciones

Uno de los primeros intentos por sacar una precuela adelante fue un guion sobre la destrucción del antiguo imperio Targaryen de Valyria de Max Borenstein ('Kong: La Isla Calavera'). Otro fue una versión de la reina guerrera dorniense Nymeriadel ganador del Oscar Brian Helgeland ('L.A. Confidential') y otro se trataba de la conquista de Poniente por parte de Aegon y escrita por Rand Ravich y Far Shariat ('La esposa del astronauta'). Ese guion destacaba a la figura inspirada en Guillermo el Conquistador y lo trataba como un patán borracho.

Para lo que se conoció en la plataforma como 'la Danza de los Dragones', HBO se acercó primero a la escritora Carly Wray, que tenía experiencia escribiendo dramas de fantasía oscura como 'Westworld' o 'Watchmen'. Pero Wray y Martin no pudieron ponerse de acuerdo sobre cuándo debería comenzar la historia en medio de la larga y enredada línea de tiempo de la historia de los Targaryen. “Las guerras a menudo comienzan en tiempos de paz”, dice el libro de Martin, y era importante para el autor mostrar esa transición. Pero tal movimiento significaría una serie que abarcaría generaciones, y ¿cómo serían capaces de plasmar eso exactamente?

Luego vino Bryan Cogman, coproductor ejecutivo de 'Juego de Tronos', que escribió varios de los más aclamados episodios de la serie original y entendía la franquicia mejor que nadie. Las fuentes internas dicen que su versión era buena, pero HBO finalmente pasó de ella. "Al principio, HBO pensaba: '¿Podemos subvertir 'Juego de Tronos'?", recuerda Miguel Sapochnik. “La presentación de la 'Danza de los Dragones' dio la sensación de ser una precuela obvia y directa. Así que creo que estaban menos entusiasmados porque era como, "Bueno, ¿quién quiere ver más 'Juego de Tronos'? No lo tenían muy claro". Qué ironía, porque todo el mundo quiere más 'Juego de Tronos'.

Condal está de acuerdo: "El deseo de HBO era no solo ofrecer una secuela que tratara sobre la guerra por el trono. Querían hacer algo tan totalmente diferente que dejara boquiabiertos a todos".

Los dragones serán numerosos y muy protagonistas en la nueva serie del universo de 'Juego de Tronos',

'Luna de Sangre', la serie que nunca existió

En 2018, un año antes de que se emitiera el final de la guerra entre los Targaryen, los Stark y los Lannister, HBO anunció un episodio piloto para una posible serie sucesora: un título con el título provisional de 'Luna de Sangre', que se desarrollaba años antes de los eventos de 'Juego de Tronos' durante la legendaria 'Era de los Héroes' y el apocalipsis invernal conocido como 'La Larga Noche'. Tenía hasta showrunner, Jane Goldman, que traía las mejores referencias al haber estado involucrada en películas como 'Kick-Ass' y 'Kingsman: El Círculo de Oro'.

Según Orsi, 'Luna de Sangre' se aupó al principio como la idea ganadora por méritos propios. "'Luna de Sangre' destacó por ser diferente, con una construcción de mundo única", reconocía Orsi. "En cuanto al tono, era muy adulto, sofisticado e inteligente, y había un par de ideas conceptuales en el corazón mismo de la serie muy potentes en torno a la privación de derechos frente al colonialismo y el extremismo religioso”.

El problema principal es que Martin había publicado solo unas ocho líneas de texto sobre el período de tiempo concreto en el que se desarrollaba la futura serie, dejando a Goldman poco para construir. "'Luna de Sangre' fue una tarea muy difícil", reconocía Martin. "Estamos tratando con un pueblo mucho más primitivo. Aún no había dragones. Gran parte del episodio piloto giraba en torno a una boda de una casa sureña con una casa norteña y ahí se metió en medio toda la historia de los Caminantes Blancos”.

Martin dejó muy claras sus preocupaciones a HBO sobre el desarrollo de esta serie y una fuente interna de la plataforma admitía que "tener un título que es casi todo inventado y que tenía a George (R. R. Martin) rascándose la cabeza con perplejidad en muchas ocasiones fue problemático".

Hasta el casting estaba preparado: el elenco estaba encabezado por Naomi Watts. Incluso se habían construido ya varios decorados enormes. El piloto de 'Luna de Sangre' costó una cantidad tremenda de dinero. Entre 30 y 35 millones de euros. Pero nunca conoceremos el resultado. El piloto fue guardado bajo llave por HBO en un lugar tan profundo que ni siquiera el propio George R. R. Martin ha tenido autorización para verlo.

Naomi Watts

Las voces de la plataforma son tajantes: Bloys cree que "requería mucha más invención; era un riesgo mucho mayor y mayor habría sido la recompensa y no había nada evidentemente malo en ello. Pero la vida es así. Los episodios pilotos tienen desarrollos complicados.".

Robert Greenblatt, que por aquel entonces era presidente de WarnerMedia reconoce que "no era imposible de ver, ni horrible, ni nada por el estilo. Estaba muy bien producido y se veía extraordinario. Pero no me llevó al mismo lugar que la serie original. No tenía esa profundidad y riqueza que tenía el piloto de 'Juego de Tronos”.

Para Goldman, las fuentes consultadas afirman que 'Luna de Sangre' fue un "shock total". Ella creía que la serie iba a salir adelante. Había conformado un grupo de guionistas para escribir completa la primera temporada e incluso estaba haciendo cambios en el episodio piloto según los deseos de la propia HBO cuando de repente se enteró del destino de la serie. Goldman nunca ha hablado públicamente de la decisión de HBO.

HBO sabía que tenía que rectificar porque todo el mundo conocía que Naomi Watts iba a protagonizar una precuela del universo de 'Juego de Tronos', así que entonaron el "mea culpa" dando una de cal y otra de arena. Reconocieron que 'Luna de Sangre' no vería la luz pero, a cambio anunciaron el desarrollo de una precuela totalmente distinta: 'La Casa del Dragón'.

El ascenso del fan

Llegamos a uno de los momentos definitorios en los que 'La Casa del Dragón' tomó forma. Pero antes, un poquito de historia: el guionista de la precuela que está cerca de estrenarse, Ryan Condal admite que en cierto modo "acechó" a George R.R. Martin.

En 2013, el guionista estaba filmando un piloto para la NBC en Santa Fe, la ciudad donde reside Martin. Fan acérrimo y reconocido de sus libros, Condal, se acercó al autor y le preguntó si podía invitarlo a cenar. Martin estuvo de acuerdo y los dos entablaron una amistad. Cinco años después, Martin le envió a Condal un mensaje que le cambió la vida. "Simplemente dijo: "Oye, estoy en la ciudad para los Emmy, tomemos una cerveza, tengo un trabajo para ti, si quieres"", recuerda Condal. "Y perdí la cabeza".

Como ya habréis adivinado la reunión giraba en torno al proyecto todavía entonces denominado como 'La Danza de los Dragones'. Martin estaba decidido a hacer su epopeya con los Targaryen. "George estaba frustrado porque esta era la historia que realmente quería contar", recuerda Condal.

"No estaba listo para rendirme", dice Martin. "Me gustó la escritura de Ryan y él conocía mi mundo casi tan bien como yo”. Al día siguiente, Condal recibió una llamada de sus agentes. Dijeron: "'¿Tuviste una reunión con George R.R. Martin ayer? porque HBO acaba de llamar basándose en eso y nos ha hecho una oferta”. Así es Hollywood. Tan cruel como idílico. A veces los sueños sí se hacen realidad.

La rapidez con que HBO se sumó al deseo de Martin de contratar a Condal fue el comienzo de un giro en la relación del autor con la cadena. Durante las últimas temporadas de 'Juego de Tronos' y los primeros años de HBO buscando su serie sucesora, Martin se sentía fuera de lugar. Todo cambió tras la furibunda reacción de los fans a la 8ª y última temporada de la serie original. Creo que no hace falta recordar que muchos de ellos protestaron porque sentían que la serie entró en un ritmo atropellado y apresurado hasta su conclusión. Martin siempre había abogado para que 'Juego de Tronos' durase 10 temporadas pero no le hicieron caso. Si a la riada de críticas negativas le sumáis el momento en que HBO produjo y rechazó 'Luna de Sangre', todos dentro de la plataforma estuvieron de acuerdo en que la influencia de Martin aumentase de nuevo. En pocas palabras, HBO pensó: "Oye, igual deberíamos escuchar más al tipo que creó todo esto".

George R. R. Martin, creador de Juego de Tronos

En 2021, la compañía firmó con Martin un megacontrato de cinco años por valor de unas mareantes ocho cifras que no ha trascendido. Esta rúbrica dio poder a Martin para supervisar cada proyecto que, a partir de entonces, HBO ha puesto en desarrollo basado en su trabajo. Se volvía así a una colaboración que no existía desde los primeros días de 'Juego de Tronos'.

La elección de Condal por parte de Martin terminó demostrando aún más la perspicacia del autor: la versión de Condal sobre la guerra de los Targaryen, fue considerado por la plataforma como el guion más fuerte de todas las precuelas de 'Juego de Tronos' ideadas hasta el momento, superando los esfuerzos de escritores más experimentados.

A Condal se le unió otra persona más que ha sido capital para sacar adelante la serie: Miguel Sapochnik. Este director ganador del Emmy dirigió algunos de los episodios más aclamados, difíciles y espectaculares de 'Juego de Tronos' (como 'La Batalla de los Bastardos' o 'Vientos de Invierno'). Aunque para ser sinceros, Sapochnik era, por decirlo suavemente, reacio a ser arrastrado de regreso al mundo de Poniente. "Miguel dijo: "No volveré a hacer más 'Juego de Tronos'" recuerda Condal.

Una vez más, una relación fortuita jugó un papel clave. Sapochnik ya era amigo de Condal y había aceptado ayudar a desarrollar 'La Casa del Dragon', brindando orientación como alguien que conocía "qué hacía falta" para perpetuar el éxito de la serie original. En el camino, Sapochnik se fue involucrando más y más con el proyecto.

Miguel Sapochnik es una de las principales mentes pensantes de 'La Casa del Dragón'.

Con Sapochnik a bordo, Condal se concentró en los guiones y Sapochnik en la dirección del episodio piloto, el 6º y el 7º. Eso sí, ambos trabajaron en la historia general y en el montaje de la serie. La idea era emular la estrecha asociación de Benioff y Weiss que había sido tan eficaz en la gestión de las complicadísimas decisiones del día a día que tuvieron que tomar en la mastodóntica producción de 'Juego de Tronos'.

El director de programación de HBO, Casey Orsi reconoce que fue la combinación de la escritura de Condal, la experiencia de Sapochnik y el apoyo entusiasta de Martin lo que impulsó la confianza de HBO en el proyecto. Además, el tiempo corría en contra: la compañía se estaba preparando para lanzar HBO Max y habían puesto todas sus esperanzas en ella. Por eso, tener un proyecto como 'La Casa del Dragón' era capital para la viabilidad de la nueva plataforma.

Ahora Condal y Sapochnik "solo" tenían que hacer una serie que realmente pudiera volar, y hacerlo bien a la primera. Demasiada presión. Los mimbres están. El dinero, por supuesto que está. El resultado (y el veredicto) lo tendremos en nuestras pantallas el próximo 22 de agosto.

Son tío y sobrina pero no por eso tienen que llevarse bien...