El protagonista del vídeo viral que ilustra estas líneas es un joven a quien su padre ofreció 1.000 dólares si metía una canasta imposible en solo tres intentos. El chico aceptó la apuesta y se dispuso a marcar la canasta, que se encontraba muy lejos del lugar desde el que debía tirar.

Tras un intento fallido, el padre le hizo un segundo ofrecimiento: 250 dólares simplemente por golpear el aro. Puedes conocer el desenlace de esta competición -y la reacción de ambas partes ante el mismo- en el vídeo principal de esta noticia.

La sincera petición de un cliente al encargar una hamburguesa

Un cliente solicitó que le pusieran la hamburguesa sin cebolla al hacer un pedido a domicilio, algo de lo más habitual. Sin embargo, su sinceridad a la hora de explicar el motivo desata las risas de Dani Mateo, como puedes ver en este vídeo: