Novedades en la investigación sobre el crimen del canónigo de Valencia, presuntamente asesinado por un hombre con quien mantenía una relación . La Policía se llevó hasta siete pendrives del escritorio de la víctima, según el diario 'Levante', así como un segundo móvil que el religioso guardaba bajo llave en una capilla en su vivienda.

Este dispositivo, según explica Leo Álvarez en Más Vale Tarde, se suma al teléfono del cura que el presunto asesino se habría llevado y desde el que envió mensajes fingiendo ser la víctima para despistar a los agentes, y a otro móvil que el detenido habría comprado con la tarjeta del canónigo.

Además, según recogen medios locales, el canónigo mantuvo relaciones sexuales con un hombre de 34 años con un 43% de discapacidad a quien conoció en la estación de autobuses y a quien habría enviado dinero para que viajara a Valencia para visitarle.

Esta persona reconoce haber mantenido al menos un contacto sexual con el canónigo y podría tener un papel clave en la investigación, porque estuvo con el cura el fin de semana antes del crimen. De hecho, habría abandonado su casa el mismo domingo 21 de enero por la mañana, fecha en la que podría haberse perpetrado el asesinato.