En la foto de la inauguración del Museo Thyssen-Bornemisza, en 1992, aparecen los barones "en todo su esplendor físico y de reputación", como mostró Equipo de Investigación en 2013, en un reportaje que laSexta ha emitido nuevamente este sábado.

Para llegar a ese punto, España negoció durante seis años con el barón. Carmen Alborch recordó que "hubo tentaciones. La señora Thatcher tenía desde siempre mucho interés en que la colección Thyssen se quedara en Gran Bretaña.

Sin embargo, la baronesa consiguió inclinar la balanza hacia el lado español. El Estado compró 775 cuadros al barón por 300 millones de euros. "Aunque parezca una cantidad desorbitada, lo cierto es que se pueda doblar o triplicar esa cifra", explicó el periodista Alberto Bertín.

Esos cuadros son la colección permanente. "El Estado pagó esa cantidad y se creó una fundación en la que hay ocho miembros designados por Cultura y cuatro a iniciativa de la familia", expuso Alborch. ¿Por qué eligieron esa fórmula? El experto en fundaciones José Manuel Gil dio la respuesta: "Uno de los motivos es que una fundación sin ánimo de lucro está exenta de impuestos".

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2013 que laSexta ha vuelto a emitir este sábado.