Los vecinos del municipio zamorano de Toro llevan meses sin poder beber agua del grifo debido a los altos niveles de arsénico que porta por culpa de la "sobreexplotación de un acuífero que abarca cinco provincias", explica su alcalde, Tomás del Bien, a María Avizanda en este reportaje.

Y, es que, este "mar subterráneo" del que se abastecen no es capaz de hacer frente a la demanda debido a la escasez de lluvias que no permite que se "recupere el nivel de agua".

Por eso, Tomás del Bien ha puesto para que los vecinos puedan beber agua potable un "sistema de mini potabilizadoras portátiles en siete puntos de la ciudad para que la gente pueda abastecerse y luego, a los hogares donde hay personas mayores y con movilidad reducida, se les está repartiendo agua embotellada". Puedes escuchar su entrevista al completo en el vídeo principal de la noticia.