La empresa Meccti, encargada de seleccionar personal de cabina para la aerolínea Kuwait Airways, se ha pronunciado por primera vez sobre la polémica que han generado unas entrevistas en las que, según denuncian algunas candidatas, se las obligó a quedarse en ropa interior, se las trató como "animales de zoo" y se lasvejó con comentarios sobre su aspecto físico y su peso.

Meccti niega lo denunciado por las afectadas, descarta que Trabajo lo esté investigando y echa balones fuera explicando que se subcontrató este proceso de selección a otra empresa Meiservices Sarl, con base en Marruecos. "La empresa niega rotundamente la veracidad de las aseveraciones difamatorias de quienes participaron en el proceso de selección, y especialmente que las entrevistas tuvieran lugar con conductas vejatorias como las denunciadas", manifiestan los abogados de la compañía en un comunicado.

Además, señalan directamente a una de las jóvenes que estos días ha contado a laSexta y a 'eldiario.es' cómo fue el denigrante proceso de selección. Aseguran que "la candidata referida como Bianca" no pasó la prueba grupal de inglés y no participó en las siguientes entrevistas, "por tanto, no pudo ver o vivir lo que denuncia".

Así, aseguran que emprenderán acciones legales "contra aquellas personas que hayan podido difundir hechos y prácticas completamente falsos", algo que, dicen, afecta a la imagen de la compañía.

Trabajo investiga lo sucedido

Por otro lado, afirman no haber recibido ningún tipo de notificación por parte de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Desde Trabajo aseguran a laSexta quese analiza tanto el proceso de selección como la propia oferta de trabajo que la compañía publicó en sus redes sociales, y advierten de que podrían ser objeto de sanción por infracciones muy graves en el marco de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, que prevé hasta 225.000 euros de multa en estos casos.

Y es que en España no se puede exigir en una entrevista de trabajo datos de carácter privado que puedan resultar discriminatorios ni atentar contra la intimidad y la dignidad de las personas trabajadoras, tal y como parece que se ha procedido en la oferta de empleo —en la que se especificaba que la altura y peso de las aspirantes debían estar proporcionados y, además, contar con un buen estado de salud—, y del proceso de selección en cuestión.

Por ello, aunque la Inspección de Trabajo no ha recibido denuncias por los cauces oficiales sobre esta oferta de trabajo, decidió abrir una investigación de oficio para estudiar si los hechos descritos por las candidatas afectadas pueden ser constitutivos de delito. De ser así, remitirán los informes pertinentes a la Fiscalía para que abra las diligencias oportunas.

En Al Rojo Vivo lo confirmó Joaquín Pérez Rey, secretario general de Empleo y Economía Social, quien denunció esta "lamentable" situación. "Con ocasión de seleccionar a alguien para un trabajo no se le puede someter a estas condiciones indignas y que invaden la esfera de la privacidad hasta extremos inauditos". "Vamos a hacer todo lo posible para que esta conducta sea adecuadamente sancionable, sin descartar que en la medida en que esto pueda constituir un delito trasladarle a la Fiscalía las actuaciones para que se tomen las sanciones necesarias para evitar algo tan absolutamente lamentable y que no tiene ninguna justificación", apostilló Pérez Rey.