Estados Unidos ha registrado un nuevo episodio de brutalidad policial. En esta ocasión, el suceso ha tenido lugar en el estado de Colorado, y la víctima es Michael Clark, un hombre de 75 años. Las imágenes de la cámara corporal muestran a un agente oficial de Policía de Idaho Springs usando una pistola eléctrica contra un hombre de 75, años sin previo aviso. Todo esto ocurrió cuando los agentes se pusieron en contacto con una mujer que presuntamente había sido agredida por el anciano.

Tras el ataque con la pistola, el oficial, llamado Nicholas Hanning, fue despedido debido al uso desmedido de fuerza. Hanning fue acusado formalmente de agresión en tercer grado a un adulto en riesgo y delito grave de clase seis. Previamente, los investigadores ya habían señalado que el agente usó una pistola eléctrica contra Michael Clark sin motivo.

Michael Clark, el hombre de 75 años, estaba en su apartamento cuando Hanning y el otro oficial llamaron a su puerta, pero no anunciaron quiénes eran, según la declaración jurada de arresto de Hanning. La abogada de Clark, Sarah Schielke, ha señalado que Clark nunca salió de su apartamento. Los videos muestran a Michael Clark cayendo hacia atrás después de recibir el impacto de la pistola eléctrica.

Tras el ataque, la víctima perdió temporalmente el conocimiento. Clark sufrió además complicaciones cardíacas y un derrame cerebral a causa del daño provocado por la pistola eléctirca. También habría sufrido serios daños en el apéndice y requirió cirugía en el cuello. Así ha tenido lugar un nuevo caso de brutalidad policial en Estados Unidos que ha conmocionado a sus ciudadanos.