Las redes sociales pueden ser y son un arma de doble filo. Compartir nuestra vida minuto a minuto se ha vuelto en una obsesión y parece que la fiesta no resulta tan divertida si no le enseñamos al resto del mundo lo bien que lo estamos pasando.

Sin embargo, ya no solo se comparten los momentos divertidos. Ahora, cualquier actividad cotidiana se convierte en un buen motivo para compartir con los demás y eso trae consecuencias. ¿Quién no ha compartido una foto o un comentario del que se ha acabado arrepintiendo?

Seguramente arrepentida está una joven china de la ciudad de Dandong. La chica, agente de policía, quizá pensó que conseguiría millones de likes subiendo fotos con su uniforme a la red social weibo. Y probablemente los conseguiría, pero también consiguió su despido y es que cuando la Oficina de Seguridad Pública de la ciudad se enteró no dudó en echar a la joven. Inmediatamente, la Academia de Policía de Dadong comunicó que vigilarán que nunca vuelva a ocurrir algo así que manche la “buena imagen” de su escuela, según informa ‘People’.

La joven ya ha eliminado la publicación de la red social, pero como suele suceder en estos casos, sus fotos no han dejado de circular por toda la red, abriendo el debate entre los que la defienden y los que la atacan.