Después de que el año pasado se retirara de la Fórmula 1, Kimi Raikkonen ha probado suerte en otra categoría: en la NASCAR. Sin embargo, el piloto finlandés tuvo el peor debut posible y se vio obligado a abandonar después de chocar su monoplaza contra las protecciones, provocando un daño en la llanta irreparable. Se trataba de la prueba de Watkins Glen, la penúltima de la temporada en la competición americana.

Raikkonen salía desde el puesto número 27 y fue poco a poco remontando, llegando incluso a estar en el 'Top 10'. Sin embargo, en la vuelta 46 en una curva donde había muchos coches acumulados, otro monoplaza le sacó de pista, chocando y dejando en fuera de juego al finlandés. "Me duele la muñeca, pero ya me curaré cuando regrese a casa. Esto es parte del juego", comenta.

Una de las ruedas del coche sufrió graves daños y a Raikkonen no le quedó mas remedio que despedirse así de la que fue su primera prueba en la NASCAR. Así vio el campeón del mundo de Fórmula 1 el accidente: "Tenía una buena línea, pero desafortunadamente no tuve tiempo de reaccionar. En el primer impacto alguien golpeó la llanta o las ruedas directamente".

En cuanto a su futuro en la competición, Kimi no descarta volver: "No sé si volveré, pero fue muy divertido. Me sentí más seguro todo el tiempo y tuve algunas buenas luchas. El coche se sentía muy rápido, pero a veces así son las cosas".

"No tengo nada en contra de la NASCAR. Todo estuvo bien y fueron muy amables y serviciales. Pero todo se frustró por estar en el lugar equivocado", añade.