Hace unos años, hablar de récords en Fórmula 1 era hablar de Mercedes. La escudería alemana dominó con puño de hierro los primeros ocho campeonatos de la era híbrida, consiguiendo siete títulos de pilotos y ocho de constructores, algo que le sirvió a Lewis Hamilton para convertirse en uno de los pilotos más laureados en la historia de este deporte.

Sin embargo, la llegada del nuevo reglamento y el regreso del efecto suelo en 2022 provocó un giro de guion en la categoría. Red Bull se convirtió en Mercedes, consiguiendo tres Campeonatos de Pilotos y dos Campeonatos de Constructores consecutivos. Pero no solo eso. No únicamente ha sido el qué se ha conseguido, sino el cómo.

Los de Milton Keynes completaron en 2023 la mejor campaña jamás realizada por ninguna otra escudería. Red Bull se hizo con 21 de las 22 carreras que se disputaron, algo que ni Mercedes fue capaz de conseguir en sus mejores años durante la década pasada.

Ahora, dos temporadas después de su último Campeonato de Constructores, los de Brackley sueñan con volver a lo más alto. Aunque su llegada a esta nueva era en 2022 fue bastante decepcionante, decidieron seguir apostando por su innovador concepto sin pontones para 2023, esperando obtener un mayor rendimiento.

A pesar de los esfuerzos por destacar con algo completamente diferente, los alemanes se vieron obligados a abandonar esta idea al no ver resultados en su W14. Para esta nueva temporada, George Russell se muestra mucho más optimista con un monoplaza con el que esperan batallar con Red Bull.

"Ciertamente creo que estamos en un lugar mejor ahora que hace 12 meses. Hemos estado trabajando en nuestro nuevo concepto de coche durante varios meses. Hemos cotejado todo 1.000 veces y todos estamos muy seguros. No hay duda de que Red Bull comenzará la temporada en lo más alto. Pero es una temporada larga. Comienza más temprano que nunca y termina más tarde que nunca. Las cosas pueden cambiar", señaló el británico a 'Telegraph'.

"Por mi parte, estoy emocionado. Me siento bien conmigo mismo. Y el año que viene es un borrón y cuenta nueva para todos. Espero una temporada en la que pueda rendir y obtener los resultados como lo hice en 2022, o al menos maximizar los resultados como lo hice en 2022. Mi confianza no se ha visto afectada en absoluto", afirmó.

El expiloto de Williams aterrizó en Mercedes en la temporada 2022, aunque ya compitió en un Gran Premio con la escudería alemana en 2020 a causa de una infección por COVID de Lewis Hamilton. El británico firmó una gran primera temporada en Mercedes, convirtiéndose en el primer compañero de equipo desde 2016 que conseguía batir al siete veces campeón del mundo.

"He estado al nivel de Lewis, en promedio, a lo largo de este año. Y no estoy satisfecho con estar a su nivel. Quiero estar por delante de él. Pero también tengo que ser realista. Me enfrento al mejor piloto de todos los tiempos. Definitivamente no es un mal punto de referencia", señala.