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Asesinato frustrado en Málaga: detienen a dos sicarios, uno de ellos menor, cuando se disponían a cometer el crimen
Los detalles Los detenidos estaban vinculados con una red criminal sueca que, a través de redes sociales y plataformas encriptadas, ofrecía remuneración a cambio de matar. La organización se había encargado de facilitarles la vivienda y las armas.

Resumen IA supervisado
La Policía Nacional, en colaboración con Europol y la Policía sueca, detuvo en Málaga a dos sicarios procedentes de Suecia, uno de ellos menor de edad, que iban a cometer un asesinato en la ciudad. Los jóvenes, vinculados a una organización criminal dedicada al narcotráfico, fueron interceptados a medianoche en un patinete eléctrico, ocultando sus rostros con capuchas y pasamontañas. Se alojaban en Fuengirola, donde se hallaron armas de fuego con números de serie borrados. La organización criminal les proporcionó vivienda, armas y transporte. Además, se detuvo a otros cuatro integrantes de la red, incluyendo al líder.
* Resumen supervisado por periodistas.
Subidos a un patinete eléctrico, con el rostro oculto bajo pasamontañas y mascarillas y, presuntamente, camino a cometer un asesinato. Así fue cómo la Policía detuvo a dos sicarios, uno de ellos menor de edad, que habían llegado a España desde Suecia para cometer un crimen en Málaga. Los detenidos tenían relación con una red criminal dedicada al narcotráfico que les facilitó la vivienda y las armas. Hay otros cuatro detenidos.
Ocurrió a finales de junio, cuando la Policía Nacional, trabajando junto a la Europol y la Policía sueca, supo que los dos jóvenes, uno de ellos menor, habían llegado a Málaga en un vuelo desde Göteborg. Consiguieron localizarles en cuestión de 48 horas y les interceptaron justo cuando, a medianoche, se dirigían al paseo marítimo de la ciudad en un patinete, ataviados con ropa oscura y ocultando su rostro con capuchas, pasamontañas y mascarillas.
Se alojaban en una vivienda de Fuengirola, donde los agentes encontraron dos armas cortas de fuego municionadas con sus respectivos cargadores y los números de serie borrados. El detenido mayor de edad entró en prisión, mientras que la Fiscalía de Menores decretó el ingreso de su compañero en un centro de menores con régimen cerrado.
La Policía descubrió que los dos jóvenes tenían relación con una organización criminal sueca presuntamente dedicada al tráfico de cocaína y marihuana que estaba siendo investigada desde abril. Esta organización usaba plataformas encriptadas y redes sociales para ofrecer una remuneración económica a cambio de cometer un asesinato.
La citada organización criminal se había encargado de toda la logística, facilitándoles la vivienda, las armas y hasta el patinete eléctrico para asegurarse de que conseguían su objetivo. Finalmente, la Policía arrestó a cuatro integrantes de esta red, entre ellos al presunto líder, acusados de conspiración para el asesinato, tenencia ilícita de armas y pertenencia a organización criminal.
En esa operación, la Policía intervino otra arma de fuego, guantes, pasamontañas, mascarillas, una bicicleta y un patinete eléctrico, 15 teléfonos móviles, 16 tarjetas SIM, dinero, material informático y numerosa documentación y anotaciones manuscritas.