Max Verstappen no quiere hablar más de su supuesta salida de Red Bull. Ha cerrado la puerta. Y lo ha hecho de manera contundente. No quiere abandonar la escudería a pesar de esa supuesta mala relación entre su padre, Jos, y Christian Horner.

En la previa del Gran Premio de Arabia Saudí, Max ha hablado de "insinuaciones" y pide un "ambiente tranquilo": "Vi muchas historias sobre eso, lo cual no es nada extraño de leer, pero por mi parte lo que quiero, y no importa quién esté involucrado en el equipo o no, es tener por supuesto un ambiente tranquilo donde todos están felices de trabajar".

"Por supuesto, esa siempre ha sido la intención del fichaje. Por eso firmamos por tanto tiempo para estar aquí. Y, por supuesto, se trata del rendimiento del coche. Y, por supuesto, a partir de 2026, de todos modos, eso es un signo de interrogación con las nuevas regulaciones, pero lo sabía cuando firmé mi contrato", dice sobre la escudería de las bebidas energéticas.

Y deja claro que quiere seguir: "Pero también sé lo que han hecho por mí en mi carrera, ¿verdad? Así que, por supuesto, la intención es absolutamente quedarme en este equipo porque realmente lo disfruto y también estoy muy feliz dentro del equipo. Y mientras tanto, no hay razón para irnos".

Sobre la escudería Mercedes y la posibilidad de sustituir a Lewis Hamilton, deja claro que la vida puede dar muchas vueltas: "Nunca sabes lo que sucede o lo que te llega o lo que sucede a tu alrededor o lo que podría influir en ti. Así que nunca se puede decir al 100% que así será".

"Abordo mi vida así, pero tampoco pienso demasiado en ello. Estoy muy relajado. Como dije, estoy muy feliz en el equipo. Así que estoy contento en el equipo, el rendimiento está ahí, no hay motivos para irme", sentencia el tricampeón.