Hay radios de Fórmula 1 que son más que claras. Con escucharlas se puede ver la tensión del momento. Charles Leclerc, muy frío, lanzó un mensaje a Ferrari nada más terminar el Gran Premio de Mónaco.

Porque el equipo, con una desastrosa estrategia para entrar a boxes, le condenó a la cuarta posición por detrás de su gran rival por el campeonato, Max Verstappen.

Fue muy frío Leclerc en sus palabras: "No tengo palabras. Ay, ay, ay... Esto es largo, pero no podemos hacer esto".

Su enfado era mayúsculo. Se pudo apreciar durante toda la carrera. Por radio y también con el parón por la lluvia. El monegasco, muy serio, caminaba por su box sin hablar con nadie.

Ferrari le pidió entrar a boxes para cambiar ruedas, y justo cuando estaba entrando le pidió que se quedara fuera. Y Charles explotó, consciente de que se está jugando el campeonato en cada carrera.

Mucho tendrá que mejorar Ferrari, porque este tipo de errores pueden ser claves a final de año. Mientras Sergio Pérez, recién renovado con Red Bull, se metió en la pelea por el mundial con su victoria. Más problemas para Leclerc.