Todo apunta a que se viene un fin de semana complicado para Carlos Sainz en el Gran Premio de Francia. Tras el incendio en su coche en Austria, ahora podría verse obligado a salir desde la última posición en la carrera del domingo en el circuito de Paul Ricard.

Varios medios han informado que la intención de Ferrari es cambiar el motor de Sainz, lo que supondría el cuarto cambio de la temporada con la correspondiente sanción.

A pesar de que el español estrenó su tercer motor en Silverstone, un motor que sigue funcionando bien, desde Maranello prefieren cambiar la unidad de potencia.

El motivo es que ese nuevo motor incorporará una serie de modificaciones con respecto al que Sainz tuvo en Silverstone.

Será un domingo complicado para el Ferrari, partiendo desde la cola de la parrilla. Y más después de su abandono en Austria. Si quiere estar en la pelea con su compañero, Charles Leclerc, deberá recortar puntos antes de que avancen las carreras y sea demasiado tarde.

El monegasco está metido de lleno en la pelea con Max Verstappen, pero Sainz se aleja. En Paul Ricard tocará remontar... e intentar llegar a los mejores.

Mejorar en las salidas

El español precisamente esta semana ha hablado de una de las debilidades que tiene el F1-75 esta temporada: las salidas. Será un factor clave en Francia para empezar a recuperar posiciones desde el inicio.

"Las salidas no van bastante bien, tenemos un pequeño problema con el coche, sabemos cuál es, que nos limita, sobrevivimos en los primeros metros y luego atacamos en las primeras curvas", dijo el español a 'As'.