Esta nueva modalidad de carreras comenzaron a formar parte del reglamento la pasada temporada. A pesar de que sólo se realizaron tres, su objetivo era la creación de mayor espectáculo para atraer y, según indica Fernando Alonso, satisfacer a los aficionados. El gasto que suponen las puede poner en jaque de cara a la siguiente temporada.

"Creo que este formato está hecho para los aficionados, para mejorar el espectáculo y atraer a fans diferentes y nuevos al deporte", comentó Alonso. Por ello, el asturiano defiende que son ellos los que deben decidir, y no los equipos o los pilotos. "¿Qué les parece el fin de semana? ¿Qué estuvo bien, qué no estuvo bien? Y si tenemos que cambiar algo, ellos deben decidir", señaló.

Fernando Alonso, quien tiene una opinión favorable sobre esta nueva modalidad de carreras, dio un recital en el sprint del GP de Gran Bretaña de F1. Partió 11º, adelantó a seis monoplazas en la primera vuelta y se colocó en quinta posición. Por ello, se mostró feliz sobre este nuevo cambio, ya que, según expresó, "cambió un poco la rutina a la que estás acostumbrado el fin de semana".

El asturiano afirma que las carreras al sprint generan "un poco más de estrés", ya que los pilotos cuentan, solamente, con una sesión de entrenamientos libres. Alonso califica esta nueva variante de carreras como "diferente", ni mejor ni peor para equipos y pilotos. "Preparamos el fin de semana de una manera distinta, pero al final es lo mismo para todos", comentó el bicampeón mundial.

Tras las buenas sensaciones que causaron las tres carreras sprint, en los planes de la Fórmula 1 se encuentran seis carreras de esta modalidad para 2022. En 2021 la F1 entregó 100.000 dólares por evento a cada equipo, 450.00 dólares para las tres carreras realizadas y alrededor de 88.000 euros en caso de que algún monoplaza sufriera daños graves.

Para 2022 cada equipo recibiría 2.33 millones de euros para las seis carreras, pero Zak Brown, CEO de McLaren F1, pretende que la cifra aumente hasta los cinco millones de dólares, por equipo.