Una de cada 4 personas adultas en España tiene hipertensión, es decir, tiene niveles de tensión por encima de los recomendados que serían 140-90 mmHg (o 14-9 como se dice coloquialmente). La hipertensión es de todos los factores de riesgo cardiovasculares, el más prevalente y la principal causa de morbimortalidad.
Por ello, clave prevenirla y en el caso de padecerla, controlarla y llevar a rajatabla ese control y revisión: "Un 60% de los hombres y un 35% de las mujeres con hipertensión van a tener un infarto, si no se trata y se controlan esa hipertensión", afirma a laSexta.com el Dr. Enrique Otero, coordinador del Área de Prevención de la Fundación Española del Corazón (FEC), con motivo del Día Mundial de la Hipertensión, que se celebra, hoy, día 17 de mayo.
Un 60% de los hombres y un 35% de las mujeres con hipertensión van a tener un infarto, si no se tratan y controlan su hipertensión
Los factores de riesgo más importantes para su desarrollo es en primer lugar, la edad: "A mayor edad, más probabilidad de tener hipertensión", asegura el experto. Y en segundo lugar, la sal: un consumo excesivo de sal tiene una relación directa contra la tensión: "El cloruro sódico que tiene la sal entra en las células de las arterias y se contraen, dificultando así la entrada y circulación de la sangre".
Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de sal por día no debería superar los 5 gramos diarios por persona (es decir, lo que equivale a una cucharadita de café). Y dentro de esta cantidad se incluye tanto la sal de mesa y la que usamos al cocinar, como la sal invisible, esto es, aquella oculta en los alimentos que supone hasta el 70% de la sal que consumimos en total, a diario. "Los datos de Andalucía, por ejemplo, nos dicen que la media del consumo de sal por persona y día se sitúa entre los 12 y 15 gramos. Muy por encima de esos 5 gramos de sal que indica la OMS", lamenta el doctor.
Así y según añaden por su parte los expertos de laSociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), aunque hay una susceptibilidad genética hereditaria que pueden favorecer su aparición, los principales factores para padecer hipertensión son sobre todo la dieta y el estilo de vida: "Una dieta con exceso de sal y alimentos ultraprocesados, la ausencia de ejercicio físico, pasar mucho tiempo sentado y el sobrepeso suelen ser causa habitual".
Y en cuanto a la edad, cuya prevalencia es mayor según van pasando los años, "se está empezando a observar un incremento de casos en niños, en los que se asocia a obesidad, malos hábitos alimenticios y sedentarismo". Por lo que no sólo es un problema de personas mayores, como se piensa. Según datos de la FEC, el 30 % de los jóvenes y entre el 3% y el 7% de la población infantil la tiene.
Para saber cómo realmente podemos controlar y sobre todo disminuir la hipertensión en las personas con los niveles elevados, es clave seguir los 4 consejos o indicaciones que nos ofrece este cardiólogo. Siguiendo estos consejos, podemos sin duda, mantener a raya nuestra hipertensión durante todo el año.
1. Saber que la tienes: el 50 % de los hipertensos/as lo desconoce
Sin duda es una de las cosas más importantes: detectar la hipertensión ya que hasta la mitad de los hipertensos no sabe que lo son, como explicaba aquí el cardiólogo de la FEC José Luis Palma. Es por ello, "fundamental realizarse a partir de los 40 años mediciones de tensión, al menos 1 vez al año", aconseja el doctor Otero.
"La hipertensión es una enfermedad que no presenta síntomas, por lo que la única manera de diagnosticarla es midiendo de manera regular de la presión arterial. Se recomienda que todas las personas mayores de 40 años se tomen la presión arterial una vez al año", añaden e insisten también los expertos de SEMERGEN.
2. Cambiar tus hábitos de vida por otros cardiosaludables
Una vez tengamos diagnosticada la tensión, una de las claves fundamentales es adoptar una serie de hábitos cardiosaludables: dieta sana, variada, equilibrada y sobre todo baja en sal, y la realización de ejercicio físico. Es importante sustituir la sal por especias para así potenciar el sabor de las comidas. Cualquier tipo de especias, cualquier que nos guste y disminuir el consumo de ultraprocesados que son los productos que más sal llevan.
3. Controlar y seguir a rajatabla la medicación
Muchas veces, muchos pacientes dejan de tomar la medicación porque se miden la tensión y ven que la tienen bien. "Pero esto puede producir un efecto rebote", asegura el cardiólogo. Por ello, es clave seguir la medicación pautada, aunque tengamos bien la tensión y nos sintamos bien, a menos que nos lo indique nuestro facultativo.
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4. Conocer si tienes más factores de riesgo cardiovascular
También y para cuidar nuestra hipertensión, necesitamos conocer si tenemos otros factores de riesgo cardiovasculares: obesidad,tabaco, colesterol, diabetes... "Porque cuantos más factores de riesgo tengamos, mayor es la probabilidad de desarrollar una enfermedad cardiovascular", indica el cardiólogo. De ahí la importancia de tratar y controlar no sólo la hipertensión sino "todos y cada uno de los factores de riesgo cardiovasculares que tengamos", finaliza el doctor Otero.