¿Cuándo se dio cuenta Ignatius Farray de que el alcohol se había convertido en un problema? "El día que llegas al hospital temblando con síndrome de abstinencia, porque si no bebía cada hora, empezaba a temblar", responde el humorista, que comparte con Jordi Évole cómo la adicción llegó a trastornarle el sueño.

"En esas situaciones hay tantos momentos patéticos, que tú te das vergüenza a ti mismo", señala Ignatius, que recuerda "no ser capaz de dormir si tú no tienes una botella de vino al lado". "Una de las cosas que te da el alcoholismo es que te desestabiliza muchísimo el sueño, te despiertas a cada momento", explica el cómico. "Yo llegué al punto de tener una botella permanentemente al lado de la cama para cada vez que me despertaba por la noche seguir bebiendo para seguir durmiendo", narra.

Ignatius relata que bebía "de todo": "Vino, whisky, ginebra, tequila, solo,mirando al abismo", rememora. Una situación de la que logró salir, cuenta, gracias a la "terapia con el psiquiatra", la "meditación" y "pensar en las responsabilidades que tienes": "La principal, mi hijo", precisa el cómico, que cuenta que este "se convierte en un punto de apoyo" y su "principal mentor".

Puedes escuchar su testimonio en el vídeo que ilustra estas líneas.