El rey emérito Juan Carlos I anunció su voluntad de dejar de desarrollar actividades institucionales y completar su retirada de la vida pública a partir del próximo 2 de junio, cuando se cumplen cinco años desde su abdicación.

La periodista Carmen Enríquez explica que desde Zarzuela no achacan su marcha a un problema de salud más grave que "lo que se ve", que es que el rey "está mayor" y tiene algunas complicaciones por sus operaciones de huesos en la espalda y la rodilla.

Institucionalmente, el abandono del rey supone desaparecer completamente de la agenda de la Casa Real, aunque la periodista avisa que pese a que se dedique completamente a su vida privada, "esto no excluye que si Felipe VI quiere que esté en algún acto porque lo considera lo correcto, vaya a estar".

Además, Carmen Enríquez también explica que esta decisión "va a tener una consecuencia económica" para Juan Carlos I, por lo que tendrán que estudiar el dinero que se le destina. La causa es que a partir de ahora no va a cobrar el dinero extra que cobran los miembros de la realeza por acudir a cualquier acto.