La mecha ya prendió el año pasado. Fue el caldo de cultivo de un nuevo resurgir feminista que, en menos de 365 días, ha conseguido que se alce la voz contra el machismo en todo el mundo. Ha sido el año del 'Me too'. Hollywood rompía su silencio ante los casos de abusos sexuales. Decenas de actrices hablaban sin tapujos delacoso que habían sufrido durante sus carreras.

Aquí, en España, vivimos el 'Yo sí te creo' contra 'la Manada'. Miles de personas se echaban a la calle para mostrar su apoyo a la joven que denunció una violación grupal en los Sanfermines de 2016. El feminismo conquistando la calle, las mujeres recuperando el espacio público para reivindicar sus derechos. También ha sido el año de la solidaridad con Juana Rivas. Nadie dudó en apoyar a la madre de Maracena que desapareció con sus hijos para no entregárselos a su padre, condenado por malos tratos.

Un año en el que hemos puesto nombre a la solidaridad entre mujeres, la sororidad, y en el que la palabra 'feminismo' ha sido elegida la palabra del año en Estados Unidos. A pesar de que algunos siguen sin querer hacer frente a la desigualdad entre hombres y mujeres, tema que intentó evitar el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante la entrevista que concedió a Carlos Alsina en el programa 'Mas de uno', el feminismo ha demostrado que no solo es una moda, que ha venido para quedarse.