Un policía estadounidense ha muerto tras ser tiroteado en su coche patrulla en la ciudad de San Antonio, ubicada en el estado de Texas.

El agente, identificado como Benjamin Marconi, de 50 años, se encontraba dentro del vehículo frente a una comisaría cuando un hombre se ha acercado al coche y ha abierto fuego contra él. La Policía local ha afirmado que el sospechoso es un hombre afroamericano de entre 20 y 30 años de edad, agregando que se dio a la fuga en un vehículo negro con las lunas tintadas.

"Consideramos que el sospechoso es extremadamente peligroso y una clara amenaza para los oficiales y el público", ha dicho el jefe de la Policía de San Antonio, William McManus.

Asimismo, ha vinculado el suceso con la muerte de policías en Dallas, también en Texas, y en Baton Rouge, en el estado de Louisiana, según ha informado la cadena de televisión estadounidense CNN. "Desafortunadamente, al igual que en Dallas y Baton Rouge, ha pasado aquí. Siempre es difícil, especialmente en días en los que los policías son atacados en todo el país", ha remarcado.