Algunos han tenido que marcharse
En silla de ruedas o con esclerosis múltiple y sin ascensor: el suplicio de vecinos de Albal casi un año después de la DANA
Los detalles Noelia cuenta a laSexta que su marido "no puede salir de casa", ya que no puede bajar y subir escaleras, mientras que para Pepe en un desafío hacerlo cada día por su problema de salud.

Resumen IA supervisado
Casi un año después de la DANA, los vecinos de un bloque de pisos en Albal siguen sin poder usar el ascensor, lo que ha obligado a algunos a marcharse, como una mujer ciega que debía subir y bajar escaleras diariamente. Noelia, quien se ha quedado, relata que su marido, en silla de ruedas, no ha podido salir de casa desde el hospital. Pepe, diagnosticado con esclerosis múltiple, enfrenta el reto diario de las escaleras, mientras que Miguel Ángel, padre de familia, lidia con subir el carrito de la compra cinco pisos. Los afectados denuncian la falta de materiales y operarios, exigiendo que el ascensor vuelva a funcionar para recuperar su normalidad.
* Resumen supervisado por periodistas.
Casi un año después de la DANA, los vecinos de un boque de pisos de Albal siguen sin poder utilizar el ascensor. Algunos han tenido que marcharse, como una "mujer ciega" que tenía que subir y bajar escaleras todos los días, mientras que los que quedan, como Noelia, aguantan como pueden. "Mi marido está en silla de ruedas y lleva sin salir de casa desde que salió del hospital", denuncia la mujer.
A Pepe, por su parte, le acaban de diagnosticar esclerosis múltiple y enfrentarse a subir y bajar escaleras es un reto cada día: "Tengo dificultad para andar y eso me provoca que subir escaleras sea un suplicio", lamenta el vecino.
Y es que subir y bajar todos los escalones de ese edificio es agotador, y más aún si hay que ir a comprar "y subir el carrito de la compra cinco pisos a pulso", tal y como señala Miguel Ángel, quien es padre de familia, y cuya rutina se complica con niños.
Sin embargo, la situación, denuncian los afectados, no parece que vaya a mejorar. Pepe subraya al respecto que cuando no dicen que "falta material, hay falta de operarios". "Siempre falta algo", critica. Así, con frustración y rabia, piden que el ascensor vuelva a funcionar para poner en marcha sus vidas.