Vivienda para todos
De Barcelona a A Coruña pasando por Madrid: ¿dónde están los 40.000 pisos que el Gobierno quita al 'banco malo'?
El contexto El Gobierno va a poner en el mercado más de 40.000 viviendas para alquileres asequibles dedicadas para familias que no llegan para pagar una casa de tres habitaciones, así como 2.4000 suelos con capacidad para construir otros 50.000 inmuebles.

El Gobierno anunciaba este martes que va a poner en el mercado más de 40.000 viviendas para alquileres asequibles dedicadas para familias que no llegan para pagar una casa de tres habitaciones, por ejemplo. Son pisos que hasta ahora estaban en la bolsa de la Sareb, más conocido como el 'banco malo', desde donde también se traspasarán 2.4000 suelos en los que se podrán levantar otros 50.000 inmuebles adicionales. Pero, ¿dónde están?
El objetivo es el de 'destensionar' el mercado y facilitar el acceso a la vivienda a través de alquileres asequibles, es decir, "dirigir estas viviendas a la clase media y trabajadora de nuestro país como alquiler asequible", explicaba la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez. De esta manera,estarán "por debajo del precio de mercado" y supondrán "menos del esfuerzo del 30% de la renta". En definitiva, "enviar aquello que un día sirvió para rescatar a los bancos, hoy sirve para rescatar a las familias", remachó la socialista.
Para saber cómo será la distribución por territorios hay que fijarse en el mapa sobre estas líneas. En él se observa como el grueso de esas miles de viviendas se ubican en la costa mediterránea donde destaca especialmente Barcelona con casi 8.000. A lo largo del litoral, le siguen Valencia (3.341), Tarragona (2.145), Murcia (2.047) y Girona (1.971)
Eso sí, en el interior, sobre todo Madrid con 2.995 y ciudades como Toledo con 1.492, también concentran un buen número. Por su parte, en A Coruña se concentran apenas un millar. Entonces, está previsto que sea en estas zonas donde se produzcan más traspasos al mercado público, que sea como sea se harán de forma escalonada. En los próximo meses, se espera que se entreguen hasta 13.000.
Una iniciativa que si bien los expertos la observan con buenos ojos, piden ser más ambiciosos. "Está bien operar en los márgenes para ir añadiendo un poco de vivienda pública, pero es que tienes que hacer algo con el 98% de las casas que están en ese mercado donde los precios no paran de subir", lamenta el codirector del Instituto Investigación Urbana de Barcelona, Jaime Palomera. De esta manera, subraya que "lo que hay que hacer es ir desarrollando un sistema de vivienda protegida obteniendo viviendas ya construidas que están o bien vacías o bien en mercados muy especulativos".