Durante los últimos días, los bancos han presentado públicamente sus beneficios empresariales del primer trimestre del año dirigiéndose a sus accionistas con mensajes de confianza. Este jueves le ha tocado al BBVA, que ha ganado 1.800 millones en tres meses, un 40% más que el año pasado a pesar del impuesto a los beneficios bancarios.

Precisamente en este impuesto a la banca se ha apoyado el Sabadell para justificar sus resultados, tras haber obtenido un beneficio de 205 millones, un 4% menos que hace un año. "Sin cerca de 160 millones destinados en este trimestre al impuesto extraordinario de la banca el beneficio hubiera ascendido", ha explicado el consejero delegado de la entidad César González-Bueno.

Las grandes energéticas, también afectadas por el impuesto impulsado por el Gobierno, también han expuesto sus resultados. Repsol ha anunciado que ha ganado hasta marzo 1.112 millones, un 20% menos que hace un año.

En total, las grandes energéticas se embolsan 2.500 millones, y cuatro de los seis grandes bancos casi 5.000, descontados ya los impuestos especiales por los que pagarán más de 1.000 millones. Figuras fiscales muy criticadas que representan alrededor del 15% de lo que han ganado.