Rafa Nadal ha hecho un gran esfuerzo para compartir pista con Roger Federer en el último partido profesional de éste. El balear ha llegado muy justo física y mentalmente como así confesó tras disputar el partido de dobles con el suizo en la Laver Cup.

"No estoy bien, han sido semanas difíciles. Pocas horas de dormir, un poco de estrés... situaciones un poco más complicadas de lo habitual en casa. Ahora todo está bien y he podido venir aquí, que era lo importante", reconoció el español acerca de unas últimas semanas muy complicadas para él.

El día estaba dedicado a la retirada de Federer. Nadal fue preguntado sobre si quería un momento final similar al realizado con el suizo, y el balear sorprendió a todos al reconocer que ha valorado la retirada esta temporada: "No lo sé, no estoy en ese momento. Estuve cerca en Roland Garros, pensaba que podía ser que fuese mi último torneo".

"Aunque desde ahí, todo haya salido muy mal. Me rompí el abdominal dos veces, desde que pude arreglar como pude lo del pie, a nivel físico ha sido un desastre. Me rompí el abdominal en Wimbledon y otra vez en Nueva York. Ha sido un cúmulo de desgracias importantes sumado a estas circunstancias personales, pero no quiero pensar en ese momento", cuenta.

"Lo que quiero es recuperar la normalidad durante todo este mes, que todo salga bien en el tema personal principalmente y organizar mi vida personal y profesionalmente", desveló Nadal, que pese a valorar la retirada tranquilizó a todos comunicando que es un pensamiento que ya no tiene en mente.

Además, la Laver Cup ha comunicado que Nadal ha abandonado el torneo por "motivos personales" tras el encuentro de dobles. El balear no hubiera estado presente en Londres si no hubiera sido para acompañara a Roger Federer en su retirada.