Marc Márquez ya viste lo colores de Gresini Ducati. El catalán, en la presentación de la que será su nueva moto en esta aventura con el equipo satélite de los italianos, lució el azul claro y el rojo con ese mítico 93. Con ese dorsal con el que ganó Mundial tras Mundial en una época en Honda que, a pesar de haber acabado como ha acabado, ha sido una de las más exitosas de todas cuantas se recuerdan en la historia de MotoGP.

Ahora, a por otro título. A por otro con, tal y como ha reconocido, la moto campeona de 2023: "Es muy similar a la que tuvieron Pecco Bagnaia y Jorge Martín. Tendré eso todo el año".

"Mi enfoque es el de ser rápido en la pista. Si puedo ser más rápido que en el primer test claro que lo intentaré. Pero una cosa es eso y otra la realidad. Mi trabajo es olvidarme de las expectativas", insiste en palabras que recogen en 'Motorsport'. 

Y sigue: "Necesito estar calmado, pero no significa no ir rápido. Eso sí, no puedo pretender ir a por la victoria desde el primer día... estos últimos cuatro años, para mí, han sido una pesadilla".

"Bagnaia y Martín, con la GP24..."

"Están además Bagnaia y Martín en la moto. Han pasado muchos años y han ganado carreras y títulos. Son muy rápidos, y tendrán la GP24. No sería lo normal estar al mismo nivel", afirma.

Márquez, en ese sentido, cuenta cómo se está sintiendo en Ducati: "Soy de Gresini, pero pilotamos una de sus motos. Gigi Dall'Igna siempre me ha tratado muy bien".

"Tras once años en Honda, con mi gente, fue raro dar esos primeros pasos sin ellos. Estaba totalmente convencido con mi decisión, y que mi hermano Alex fuese sea mi compañero hará todo más fácil. Estaba todo el mundo nervioso en Valencia, en el primer test, pero ahora hemos pasado tiempo con el equipo", sentencia.