Jorge Lorenzo ha contado la historia de su fichaje por Honda después de sus dos años en Ducati, donde tan solo ganó tres carreras. El ya expiloto de MotoGP revela cómo se fraguó su contratación con el equipo japonés, equipo que creía que no contaría con él para la temporada 2019.

Lorenzo y su representante barajaron la opción de ir a Petronas, el equipo satélite de Yamaha, pero al pentacampeón del mundo no le convencía en absoluto recalar en la escudería malasia, y se sintió frustrado al no ver que no tenía un equipo competitivo después de que se rumorease susalida de Ducati y de que Suzuki le cerrase las puertas al fijarse en Joan Mir.

"Todo lo veía negro. Me veía con 31 años sin moto, había la opción de Petronas, pero no me apetecía porque ya había estado en el equipo oficial Yamaha, eso para mí era como un salto para abajo. Estaba con una pequeña depresión, muy triste. No veía salida", afirma Lorenzo en su canal de YouTube '99 seconds'.

Pero su situación dio un giro de 360º en un test de IRTA en Barcelona, cuando llamó a su teléfono el Team Manager del Repsol Honda. "Cuando volvía del hotel en bicicleta, recibo una llamada sorprendente.Era Alberto Puig. No me quería ilusionar mucho, pero la posibilidad de incorporarme al equipo Honda 2019 era posible. Tenía que trabajarlo con los japoneses, pero ya le habían dicho que era interesante", revela Jorge, que confiesa el inicial temor que le hacía pensar que no iba a fichar por el equipo del 'Ala Dorada'.

"El escollo más importante que yo preveía, que era que Márquez supuestamente me pudiese vetar la entrada. Pero Puig había hablado con Marc y él no había puesto ningún problema. Eso me alegró. Puig me pidió que la negociación fuera secreta, que nadie se enterara. Yo no pude resistirme y se lo dije a mi entrenador, y a nadie más. No lo sabía ni mi mánager entonces, Albert Valera, al que se lo contaba todo", cuenta el tres veces campeón de MotoGP.

"Por la tarde Puig me llamó otra vez y acordamos vernos a las afueras del circuito, y me presentó la primera oferta. Tenía pocos días para aceptarla, y me sorprendió gratamente, porque dadas las circunstancias tan negativas en las que me encontraba me esperaba una oferta menor, a pesar de que la oferta era muy inferior a lo que ganaba en Yamaha y Ducati, me esperaba todavía menos. Se lo conté a Albert Valera, y a los pocos días del test ya nos fuimos a casa de Alberto Puig y firmamos el contrato", dice Lorenzo, que vio como su situación cambió antes del Gran Premio de Italia en Mugello. Carrera a la que fue "más relajado", y en la que se llevó la victoria.

Al año siguiente, Lorenzo compartió 'box' con Marc Márquez, aunque no ofreció el rendimiento esperado y acabaría marchándose a final de temporada. Finalizó el Mundial de pilotos en 19º lugar con tan solo 28 puntos.