Tras una temporada 2021 que ha sido una auténtica montaña rusa para Fernando Alonso, y a apenas 90 días de que arranquen los primeros libres del Mundial de Fórmula 2022 en Baréin, el bicampeón del mundo ya ha hecho balance de lo que el ha deparado la presente campaña.

A pesar de que el asturiano logró adaptarse con cierta rapidez a la categoría tras dos años fuera de ella probando otras disciplinas, el bicampeón del mundo de F1 es consciente de que el año ya empezó torcido desde febrero.

A pocas semanas de los test de pretemporada, Alonso sufrió un atropello cuando entrenaba en bicicleta en Lugano y tuvo que ser operado de una fractura en la mandíbula y le reconstruyeron varios dientes rotos.

La lesión le lastró durante varios meses en los que pilotó con dolor, pero ya en la segunda mitad de la temporada, tal y como se ha visto sobre el asfalto, Fernando logró adaptarse y eludir el dolor.

Eso sí, ahora, una vez terminada la campaña, es hora de pasar por 'chapa y pintura'. "Pasaré por el hospital a quitarme las placas del accidente de febrero, tendré unas semanas de reposo para llegar listo a los test de Barcelona", señaló tras el GP de Abu Dabi.

Después de que le quiten las dos placas de titanio que han ayudado a fijar los huesos afectados, el ovetense deberá pasar unas semanas de descanso físico para mentalizarse, que no preparar, 'El Plan' de 2022.

Antes, este mismo miércoles 15, Alonso probará las nuevas ruedas de 18 pulgadas de Pirelli para posteriormente, los días 17 y 18, participar en las 24 horas de Dubái de karting junto a Pedro de la Rosa.