En apenas siete días Lewis Hamilton ha pasado de quejarse de un terrible dolor de espalda, un dolor que incluso le convirtió en duda para correr el Gran Premio de Canadá, a "sentirse joven" después de terminar en el podio.
Y no sólo fue subir al cajón. También, superar a su compañero de equipo, George Russell. Algo que no había saboreado este curso en el que el joven británico le estaba superando cada fin de semana. Ahora espera el siete veces campeón que este podio se convierta en un cambio de tendencia.
"Hemos tenido una batalla dura este año con el coche y como equipo, pero nunca nos rendimos. Me inspira mucho todo mi equipo. Gracias a todo el mundo que está aquí y en las fábricas", dijo Hamilton al finalizar la carrera.
Aunque reconoce que todavía es pronto para pensar en un Mercedes aspirante a todo: "Son demasiado rápidos para nosotros, pero hay que seguir empujando para estar en la lucha con estos chicos. Nuestro ritmo era bastante bueno, sobre todo la segunda tanda. Hemos trabajado mucho en el simulador y en la configuración".
"Estoy bien, vuelvo a sentirme joven", apuntó sonriendo Hamilton. Una sonrisa que apenas se le había visto en este 2022.
Porque a pesar de este podio, el segundo para él esta temporada, Russell sigue por delante en el campeonato. Es cuarto con 111 puntos, mientras que Hamilton ocupa el sexto lugar con 77.
Mercedes quiere mantener la paz entre sus dos pilotos. Toto Wolff pide apostar por el "espíritu de equipo": "Los últimos dos fines de semana han demostrado el espíritu colectivo del equipo para extraer una sólida cantidad de puntos, incluso si nos falta el ritmo para desafiar a los rivales que están al frente".